¡Fuchi! ¡Guácala!
Cuando estábamos muy chicos, realmente bebés. Lo que estaba a tu alrededor se convertía instantáneamente en comida: una piedra, un puñado de tierra, etc.
¡No bebé, eso está sucio! ¡Fuchi, guácala! Nos gritaba mamá con genuino gesto de desagrado. Bueno, pues hay quien usa estas expresiones también con los adultos. Pero ¿de dónde salen estas palabras? ¿Qué significan?
La palabra “fuchi” puede ser una contracción —o sea, una forma corta— de fúchila, y ambas expresan desagrado o rechazo. Son lo que llamamos “interjecciones” y son muy útiles a la hora de que queremos expresar emociones, sentimientos o impresiones. Ya que andamos muy gramaticales, le diré también que hay interjecciones propias, que por lo general no significan nada por sí mismas, como: ¡ay! ¡bah! ¡ay! ¿eh? También hay impropias, que se basan en otras palabras que sí existen: ¡socorro! ¡auxilio! ¡adelante!¡bravo!
No se me confunda porque suena muy parecido a “intersección” y eso significa algo muy diferente: es el punto de encuentro de dos o más cosas; por ejemplo, la intersección de varias calles, es decir, el lugar en el que se juntan.
Oiga, ¿y guácala? preguntará mi querido lector. Pues igual que las otras, es una interjección y su origen —como con el caso de fuchi— es algo difícil de rastrear. Algunos etimologistas dicen que “guácala” es una expresión que evolucionó muy parecido a la de “¡aguas!”, que si se acuerda usted, era una advertencia que se daba en épocas coloniales cuando se arrojaban los contenidos de las bacinicas por la ventana —ya que no existía el drenaje— y nada más se gritaba ¡aguas!, o sea que “quítate o no respondo por que te caigan mis aguas”.
Entonces, “guácala” viene de “guacal” y este del náhuatl huacalli que es una vasija tipo palangana, muy amplia pero de poca profundidad. Se usaba para lavarse las manos, la cara… y algunas otras partes que requirieran una “refrescadita”. El agua sucia del guacal también se lanzaba por la ventana y pues ¡guácala! al que le tocara que lo bañaran con ella. Consultorio Verbal
PREGUNTA DEL PÚBLICO: Sarahí Arriaga dice: “Leí en un periódico sobre el tiempo de “interregno”, pero no entendí su significado. ¿Qué es?”
RESPUESTA: El interregno es el tiempo en el que el Estado no tiene una figura de autoridad, un soberano. AHORA PREGUNTO: ¿Qué significa “alóctono”? a. Que es originario de este país. b. Que es nacido en las montañas. c. Que es un llegado del cielo. d. Que es originario de otro país. RESPUESTA: d. Lo alóctono es lo que se origina en otro lugar diferente al que se encuentra.
Lo dejo con una frase devastadoramente cierta: Los únicos que nunca se equivocan son los que nunca hacen nada. ¿Cómo dijo? Lo veo el próximo domingo.