SIN CENSURA
La actriz celebra 15 años de carrera con su primer protagónico en cine. Durante este tiempo se ha enfrentado a diversos golpes que hoy la han posicionado como una de las actrices favoritas del público
Han pasado 15 años desde que Fernanda Castillo debutó en la actuación, tiempo en que ha tenido que enfrentar los golpes de la crítica y de los productores que no la consideraban apta para interpretar ciertos papeles.
Desde hace cinco años, su carrera dio un vuelco importante con su participación en la serie El señor de los cielos, dando vida a Mónica Robles: el papel más importante de su carrera.
Ahora Fernanda estrena Una mujer sin filtro, cinta que representa su primer protagónico en cine y el inicio de una nueva etapa en su vida profesional.
“Sin duda es un momento de cosecha, de mucho tiempo de trabajo. Hace más de diez años hacía teatro, saliendo atrás, preguntándome cuando tendría un diálogo, cuándo me iba a tocar a mí la oportunidad”, recuerda la actriz de 35 años.
“Lo más difícil de llegar hasta donde estoy ahora ha sido resistir los golpes y no bajar la cabeza. Aprender. Cuando uno empieza a conocerse comienza a saber cuáles son sus virtudes y ver qué es lo que realmente quiere en la vida”, explica la originaria de Hermosillo, Sonora.
“Conforme fui conociéndome fui diciendo ‘igual y esta cara o esta altura no te funcionan para ser la protagónica de tal cosa, pero igual y te pueden funcionar para esa otra’. Esta es la única cara y la única altura que tengo, así que no me puedo pelear con ese hecho”, dice con una sonrisa orgullosa. “Después de tiempo me di cuenta de las cosas que tenía y ahora las defiendo a capa y espada”.
Fernanda sabe que ahora vive otra historia, y que lo importante es seguir su crecimiento como actriz, enfrentando otros retos. “Tendré que salirme un poquito de la comedia para reinventarme y hacer otra cosa. Me sobrepasa la emoción de lo que vivo ahora, pero creo que también es una gran responsabilidad… pero la estoy agarrando machín”, aseguró.