Sequía prolongada: llamado a la acción
El panorama hídrico para 2024 no es alentador. Según advierte Roberto Castañeda Tejeda, presidente del Consejo de la Cuenca Lerma-chapala, la sequía podría persistir durante este año, afectando gravemente a una región crucial para la producción de alimentos en México.
En una reciente entrevista con Organización Editorial Mexicana (OEM), Castañeda destacó la necesidad urgente de tomar medidas para garantizar el suministro de agua para consumo humano en esta zona.
La región que abarca la Cuenca Lermachapala es vital para la economía nacional. A pesar de representar solo el 4.5% de la superficie del país, esta área, que se extiende por cinco estados, genera el 20% del Producto Interno Bruto (PIB) de México. Con más de 11 mil industrias y una destacada producción agroalimentaria, la cuenca es un pilar fundamental para el desarrollo económico del país.
Sin embargo, la escasez de agua representa un desafío considerable. La sobreexplotación de los acuíferos es una preocupación importante, especialmente en áreas como Toluca, Querétaro y Guanajuato. Además,
la sequía prolongada y la disminución en la cantidad de precipitaciones han dejado las presas con niveles alarmantemente bajos, afectando no solo a la agricultura, sino también al suministro de agua para el consumo humano.
La situación actual exige un uso más eficiente del agua en todos los sectores. En la agricultura, por ejemplo, es necesario adoptar patrones de cultivo más sustentables y reducir la dependencia de cultivos que requieren grandes cantidades de agua. En el sector industrial, es fundamental continuar implementando prácticas responsables de uso y tratamiento del agua. Aunque algunas industrias han demostrado un compromiso con el cuidado del recurso, todavía queda mucho por hacer para garantizar que todas cumplan con los estándares ambientales.
En el ámbito urbano, es crucial promover hábitos de consumo responsables entre la población. Reducir el consumo per cápita de agua y fomentar prácticas de reutilización y reciclaje del recurso son acciones indispensables para enfrentar la crisis hídrica.
Algunas soluciones prácticas van desde concentrar el agua fría de la regadera hasta utilizar aguas residuales tratadas para riego. Existen diversas estrategias que pueden contribuir al ahorro y la conservación del agua desde lo local. Pero lo que es urgente es que esta situación sea vista con una óptima de emergencia nacional. Nos estamos quedando sin agua.
En este tema tan importante, la politiquería no queda. No queda, tampoco, politizar de quién fue la culpa por no tener agua suficiente ahora. Lo realmente importante es qué acciones conjuntas se estarán estableciendo para que no lleguemos al Día Cero, al día en que no tengamos agua, al día en que haya guerras y muertes por el líquido. Es el momento de actuar en comunidad.
El llamado es claro: la situación actual requiere la colaboración y el compromiso de todos los sectores de la sociedad. Ante la inminente sequía y la sobreexplotación de los recursos hídricos, es fundamental adoptar medidas urgentes para proteger nuestro abastecimiento de agua y garantizar un futuro sostenible para las próximas generaciones. El agua es un recurso invaluable y su cuidado debe ser una prioridad para todos nosotros.