Isaí Gabriel, el pequeño que venció al cáncer
A los cuatro años le diagnosticaron un tumor en etapa 4, pero su familia y Alucca fueron el motor que le dio el gran impulso para salir adelante
Con tan solo siete años, Isaí Gabriel Tapia Reyes ya sabe lo que es una verdadera lucha, pero sabe también que es un guerrero y que nunca se dará por vencido ante las adversidades. María Isabel Reyes Sánchez es madre de Isaí, “el Niño Milagro”, pues al menos quienes conocen su gran historia así lo llaman, porque dicen que muy difícilmente se vence el cáncer y más cuando éste es de etapa cuatro.
Desde el día que se enteró que a su hijo, a María Isabel le daban pocas esperanzas de vida, pero luchó contra viento y marea para que tomara todos sus tratamientos, pero siempre se encontró con “ángeles que Dios le puso en su camino” para facilitarle su proceso.
“Él fue diagnosticado a los cuatro años con un tumor cancerígeno, que se llama meduloblastoma, que comienza en la parte posterior e inferior del cerebro. A mi hijo se lo diagnosticaron ya cuando el tumor estaba muy grande, tenía de dimensiones 17 centímetros, estábamos en una etapa muy crítica, porque se tomó tiempo en diagnosticar, porque coincidía con otras enfermedades, entonces, cuando mi Isaí pierde la movilidad en la parte izquierda de su cuerpo, se dan cuenta que todo estaba en su cabecita”, comentó Isabel madre de Isaí Gabriel a El Sol de León.
LA BATALLA
Isaí era un niño juguetón, alegre y muy chiqueado, pues era el menor de dos hermanos; sin embargo, poco a poco comenzó a sentir un dolor que no sabía explicar, pues a sus cuatro años no sabía manifestar bien lo que ocurría dentro de su cuerpo, pero un síntoma que alarmó a su familia era que no podía dormir y aquel malestar le aumentaba cada día, hasta que ya fue insoportable.
Al llevarlo a consulta médica, los especialistas al inicio diagnosticaron que todo se debía a problemas en el estómago y comenzaron a tratarlo; sin embargo, cuando comenzó a convulsionarse, se dieron cuenta que su malestar provenía en el área de su cabeza.
En noviembre del 2020 le realizan una cirugía de más de 20 horas y lograron extirpar el 90 por ciento del tumor de grado cuatro y se quedó el 10 por ciento, al ser un tumor tan agresivo se trató con oncología.
El porcentaje que le quedó del tumor en su cabeza, podía crecer en tres meses por ello, era importante la realización de quimioterapias y radioterapias. Isaí duró bastante tiempo en terapia intensiva porque la cirugía afectó varias partes del cuerpo y cuando salió de la operación, le comentaron a su mamá que tal vez no pudiera deglutir, caminar, hablar y así fue por ello le hicieron una traqueotomía y una gastrostomía.
“Empezaron con quimios y 35 sesiones de radioterapia, ocho ciclos de cinco días día y noche, no lo logró y no terminó su ciclo, sólo logró seis porque su cuerpo no aguantó, ya llevaba demasiadas transfusiones de sangre y plaquetas y la oncóloga dio por termina la quimioterapia porque ya tenía neutropenia, entonces no era viable continuar", comentó.
“Posteriormente hicieron la vigilancia de entrar en revisión, le mandaron hacer un estudio para ver que tanto había funcionado, y me dijeron que no funcionó que todavía había cáncer en su cerebro”, dijo Isabel con un nudo en la garganta.
Contó que los especialistas le dijeron que ya no había más para hacer por el menor y decidieron llevarlo a cuidados paliativos, es decir, en un área para enfermos terminales, pero antes decidieron hacerle un estudio porque su doctora buscaba la manera de seguirle dando la mejor atención posible.
“Nosotros como su familia empezamos a buscar opciones para su tratamiento, tanto en México como en el extranjero, así que encontré que en España iba haber un ensayo clínico en el que era viable mi hijo y aunque era un ensayo yo iba ser lo posible porque eran tantas las ganas de mi hijo por vivir. Por último, le iban a hacer un estudio a Isaí para valorar qué tan grande estaba el tumor y hasta donde estaba de avanzado el cáncer mi hijo en sus estudios salieron que ya no tenía cáncer”.
EL MILAGRO
El resultado de su examen impactó a sus doctores, doctoras, enfermeras, enfermeros y todos quienes lo conocían que lo llamaron como un milagro.
Durante el proceso de recuperación y en todo momento, la Asociación de Lucha Contra el Cáncer en Niños A.C, Alucca, jugó un papel muy importante debido a que a Isabel le brindaron todas las herramientas como madre guerrera para que mantenerse fuerte, positiva y apoyada, de esta manera poder transmitir a su hijo la paz, amor, entendimiento y enseñanza que el pequeño tanto necesitaba.
“Hicimos mucha meditación, le pedimos a Dios tanto por él y en Alucca, la asociación nos apoyó y jamás entró por mi cabeza verlo sin vida”.