GRACIELA ORTIZ
Del 13 al 15 de noviembre tuvo lugar en la Ciudad de México la Cumbre Mundial de Líderes contra el Cáncer en su edición 2017, cuyo tema central es “Ciudades liderando el cambio”, esta es la primera vez que la Cumbre se desarrolla en América Latina, siendo nuestro país el honroso anfitrión.
Este es uno de los más importantes foros internacionales dedicados a fomentar el control global del cáncer de forma coordinada y multinivel, reúne a tomadores de decisiones clave de diversos países del mundo que pueden influir y contribuir en los esfuerzos para combatir y eliminar el cáncer como una enfermedad potencialmente mortal y un problema de salud pública.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cáncer es la segunda causa de muerte en el mundo, cada año surgen cerca de 12.4 millones de nuevos casos y aproximadamente unos 8.8 millones de personas mueren por esta enfermedad. De seguir así, se prevé que en los próximos 20 años los casos de cáncer aumenten en 70%.
Este padecimiento también representa una fuerte carga para la economía global, ya que se calcula que su costo anual global asciende a 1.2 billones de dólares, cifra mayor a la del PIB de México en 2016.
En México el cáncer es la tercera causa de muerte y, si bien no existen cifras exactas, el Instituto Nacional de Cancerología (Incan) estima que cada año surgen aproximadamente 190 mil nuevos casos y mueren 80 mil personas por esta enfermedad.
La Cumbre Mundial contra el Cáncer busca que la enfermedad se considere como una prioridad de salud mundial, intercambiar ideas innovadoras sobre cómo revertir la epidemia de cáncer e impulsar el tema dentro de la agenda internacional de salud pública.
Este año los trabajos se centraron en hacer de las ciudades los principales centros generadores de soluciones contra el cáncer, instando a todas las partes implicadas a participar en el diseño, planificación e implementación de soluciones para la prevención y el tratamiento del cáncer.
En ello, la reducción de las inequidades en el acceso a la salud y el mejoramiento de la calidad de vida de los ciudadanos serán fundamentales. El objetivo global propuesto por la Unión Internacional contra el Cáncer (UICC) es reducir las muertes por esta patología en un 25% para el año 2025.
México ha tenido progresos importantes en la reducción de los factores que propician el surgimiento de esta enfermedad y en el mejoramiento de la calidad de vida de los pacientes.
En la presente administración el Seguro Popular ha dado tratamiento a 129 mil pacientes con cáncer y el pasado mes de junio se creó el Registro Nacional de Cáncer, el cual servirá para conocer la situación nacional de esta patología, el número de enfermos, así como evaluar el impacto de las acciones para combatirla.
Actualmente se impulsa un programa integral de prevención y control del cáncer, que ha beneficiado a miles de mexicanos y a través del cual se espera disminuir los índices de mortalidad.
En la Cumbre, México se comprometió a participar en la iniciativa Ciudades Desafío Contra el Cáncer 2025, contribuyendo en el diseño, planificación e implementación de soluciones para esta enfermedad; así como en la meta de reducción de muertes por cáncer de la UICC.
La realización de este evento internacional en nuestro país, constituye un reconocimiento a los trabajos realizados en la materia durante los últimos años. Si bien aún falta mucho por hacer, los avances obtenidos demuestran que vamos por el camino correcto.
En México el cáncer es la tercera causa de muerte y, si bien no existen cifras exactas, el Instituto Nacional de Cancerología (Incan) estima que cada año surgen aproximadamente 190 mil nuevos casos y mueren 80 mil personas por esta enfermedad.
Senadora por el PRI