Chocan Italia y Francia por inmigrantes
La nave Aquarius ya se dirige al puerto de Valencia; La posición de Roma es “cínica... para vomitar”, acusa Macron; “de qué púlpito predica”, responde el M5E
ROMA, Italia.- Duro enfrentamiento verbal entre Francia e Italia por el caso de la nave de la ONG Aquarius, rechazada por las autoridades de Roma y de Malta con a bordo 629 inmigrantes y que ahora se dirige al puerto de Valencia, España. Todo en medio de polémicas que involucran a toda la Unión Europea (UE), “culpable” de no haber sabido elaborar una política común sobre el problema de la migración. “La posición de Italia sobre los migrantes es irresponsable y cínica! es para vomitar!”, dijo Benjamin Griveaux, vocero del gobierno de París, refiriendo el punto de vista del presidente Emmanuel Macron... Palabras durísimas que provocaron la inmediata y fuerte reacción italiana. “...¡De qué pulpito viene la prédica!", dijo Luigi di Maio, líder del Movimiento 5 Estrellas, que con la Liga de Matteo Salvini, forman el ejecutivo italiano. El primer ministro Giuseppe Conte afirmó indignado que “Italia no acepta lecciones hipócritas”. Por su parte, el ministro de transportes y de infraestructuras, Danilo Toninelli, afirmó que “Francia siempre ha volteado la cara del otro lado en materia de inmigrantes, con quienes usa una mano durísima y con sus puertos siempre cerrados a la migración...”. La nave humanitaria Aquarius, en su ruta hacia Valencia es escoltada por buques de la marina italiana, que también la abastecen de alimentos y géneros de primera necesidad. “Salvar la vida humana es un deber y lo seguiremos haciendo siempre, ¡pero no lo es transformar a Italia en un campo de progugos!”, subrayó por su parte Matteo Salvini, líder de la Liga y ministro del interior, quien acusa a la dirigencia de la UE de no compartir ecuamente la acogida de los prófugos, dejando sola a Italia con este peso. Y es en sentido que la intención del gobierno italiano es enviar una clara señal a Bruselas, sede de la UE, protestando por lo que considera un tratamiento injusto en este delicado sector. Salvini también se propone “equilibrar” el gasto para mantener a los migrantes, considerando que los 5 mil millones de euros que destina Italia con ese fin “son demasiados y superiores a lo que gastan por ejemplo Alemania, Austria y Francia”.