DESPIDEN A GEORGE BUSH EN EL CAPITOLIO
Inician cuatro días de ceremonias fúnebres al exmandatario de EU
El ataúd del 41 presidente de Estados Unidos, George Herbert Walker Bush, fue colocado en capilla ardiente en el Capitolio en Washington, dando inicio a cuatro días de honras fúnebres al exmandatario. Sus restos fueron trasladados desde Texas a bordo del avión presidencial prestado por Donald Trump.
WASHINGTON, DC. El ataúd del 41o presidente de Estados Unidos, George Herbert Walker Bush, fue colocado en capilla ardiente en el Capitolio en Washington, dando inicio a cuatro días de honras fúnebres al exmandatario. Bush, un condecorado piloto de caza de la Segunda Guerra Mundial y exjefe de la CIA que se desempeñó como vicepresidente de Ronald Reagan antes de llegar a la Casa Blanca, murió el viernes a los 94 años en su casa de Houston. Sus restos fueron trasladados el lunes desde Texas a bordo del avión presidencial prestado por Donald Trump, para recibir un primer homenaje solemne en el Capitolio, donde el exmandatario comenzó su larga carrera política. Bush, que ocupó la Casa Blanca desde 1989 hasta 1993, fue elogiado en una ceremonia a la que asistieron su hijo mayor y presidente número 43 de Estados Unidos, George W. Bush, su esposa Laura y sus familiares, así como los nueve ministros de la Suprema Corte, y en la que fueron oradores el vicepresidente, Mike Pence; el jefe de la mayoría republicana en el Senado; Mitch McConnell, y el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan. El público podrá despedirlo hoy cuando abran las puertas de la Rotonda del Capitolio donde yacen los restos del expresidente estadounidense.
"Fue un gran líder que tuvo un gran impacto en la vida de esta nación" MIKE PENCE VICEPRESIDENTE
Bush será honrado con cuatro días de servicios y tributos en Washington y en Texas, donde será enterrado el jueves. El punto culminante de las conmemoraciones será el miércoles, cuando se realizará un funeral de Estado en la Catedral Nacional de Washington, el primero para un presidente desde la muerte de Gerald Ford en 2006. Un presidente de Estados Unidos dijo alguna vez que la mejor forma de tener un amigo en Washington es conseguir un perro. Sully, el fiel perro de Bush, regresó ayer a la capital con su difunto amo. Con un arnés con los colores de la bandera estadounidense, el labrador amarillo estaba en la pista de Houston, Texas, para acompañar el ataúd de su amo a bordo del avión presidencial, Air Force One, prestado por Donald Trump.