Escocia se impone con una mayor intensidad
La selección escocesa de fútbol se situó como nuevo líder del grupo 1 de la Liga B de la Liga de Naciones, tras imponerse 3-0 a Escocia, en un encuentro en el que los locales encontraron premio a su mayor empuje ante un apático conjunto ucraniano.
Confiado, quizá, por la notable superioridad que mostró en su última visita a Glasgow, el equipo ucraniano careció de la intensidad que le permitió imponerse por un claro 1-3 al cuadro escocés el pasado mes de junio en las eliminatorias de clasificación para el Mundial de Qatar.
Si a la Selección de Escocia le faltó calidad en los metros finales, Ucrania apenas dejó ver el talento que atesoran jugadores como Andriy Yarmolenko, desaparecido todo el primer tiempo, o Ruslan Malinovskyi, que apenas dejó alguna que otra pincelada.
Sin embargo la verticalidad de Mudryk, jugador del Shakhtar Donetsk, no fue suficiente para contener el empuje de el equipo representativo de Escocia en el arranque de una segunda mitad, en el que los locales volvieron a adueñarse del encuentro.
Hasta en tres ocasiones rondó Escocia el gol, pero ni Che Adams, que primero estrelló un balón en el larguero y posteriormente envió a los pies del portero un balón que parecía destinado sí o sí al gol, ni Stuart Armstrong que con todo a su favor envió la pelota fuera de los tres palos, lograron abrir el marcador.
Un gol que llegó finalmente para el equipo escocés a los 70 minutos de juego, en una jugada en la que John McGinn le ganó por intensidad la partida a toda la zaga ucraniana.
El centrocampista del conjunto del Aston Villa se mostró más agresivo que su par en la lucha por un balón rebotado dentro del área y firmó el 1-0, que premió la mayor ambición del conjunto local.
Una Escocia que selló definitivamente la contienda con dos goles de Lyndon Dykes, que demostró a los 80 y 87 minutos el poderío en el juego aéreo del equipo local, al rematar a las redes dos saques de esquina.