“El maltrato a un animal bien puede ser el prólogo de expresiones de violencia familiar”
6 AÑOS dedicó a su aspiración de convertirse en doctora en Historia, mucho después de estudiar Socióloga en la Ibero
“Ahora bien. Hoy en día jóvenes, adolescentes y niños experimentan gran interés y cuidado por los animales. Miman a sus perros o gatos. Características de esta época. Expresión de su cultura, información, consecuencia de su concepción del mundo. De su ambiente.
“Y existen buenos, poderosos motivos para que tal iniciativa provocara interesante discusión. Cuestión de fondo. De profundo interés. Se puede concluir que el maltrato a un animal bien puede ser el prólogo de expresiones de violencia familiar de graves consecuencias.
“Imagine usted -plantea la muy inteligente diputada federal Dulce María Sauri Riancho- que el padre de familia, el señor de la casa, el esposo tuvo una jornada dura, amarga, de fracaso en la oficina. En su negocio. En sus tratos. Ese fracaso le altera el humor. Lo pone -como se dice- “de malas”... Y llega a su casa a la hora de la comida con la bilis derramada y mal contenida ira. Su fracaso lo exalta. Y si al abrir la puerta el perrito sale a recibirlo con ladridos y cabriolas y el hombre pierde la cabeza y en lugar de no hacer caso al animalito y seguir camino a la sala para darse un descanso, en lugar de eso da un puntapié -una patada- , grita un insulto al animal y libera su tensión y estalla su cólera, estamos ya en el umbral de que agreda a su esposa, insulte a sus hijos, destruya un objeto o varios. Desde dar portazos y voces de injuria hasta una severa pérdida de conciencia.
“Esta iniciativa -actualizó la Presidenta de la Mesa Directiva- provocó un dilatado y rico e interesante debate. Lo seguí con enorme interés. Se recordó que en su día Gandhi estableció que “se conoce la calidad de los habitantes de un país, por el trato que da a sus animales”. Y esa ley conoció unánime aprobación”.
Dedica amables, agradecidos pensamientos a la señorita María Elena Sánchez Algarín. “Ella me recibió cuando llegué aquí la primera vez. Algo desconcertada; desorientada. Viéndolo bien hoy me siento así. Hay diferencia. Vine la primera vez como parte de la mayoría. Hoy formo parte de los cien que hacen la oposición”,
Mujer al lado del Presidente de la Mesa Directiva, María Elena preparaba -hacíael “guión” de la sesión. Línea por línea. Introducción. Réplica. Apego al reglamento
“Imposible observar si la política es fea o bonita. Aquí se procura conciliar realidad”
interior. Guía de infinidad de legisladores. “Se jubiló hace unos pocos años”, contó Dulce María Sauri Riancho,
“Lo único que le pidió como regalo al Congreso fue un automóvil muy modesto”, refirió hace algún tiempo el Diputado Porfirio Muñoz Ledo.
“Ocupo mi lugar en la Mesa Directiva con la convicción de la pluralidad. Es mi hilo conductor. Desde luego que experimento emoción. Ahora mismo, mientras narro experimento tal sensación. Esa conciencia me permite conducir el debate. Que fluya. Y debo estar preparada para cualquier sorpresa.
“Imposible -analiza- observar si la política es fea o es bonita. Aquí se procura conciliar realidad. Tal es el límite del trabajo legislativo; la realidad. Somos traídos aquí por la fuerza de los votos y todos tenemos la convicción de que nuestro papel es conseguir que las personas que el país esté mejor. A ello nos abocamos.
“Mi formación como Socióloga ocurrió en la Universidad Iberoamericana. Y lo que son las cosas: “A la vejez...viruelas”. Decidí estudiar. Dediqué 6 años a mi aspiración de convertirme en doctora en Historia.
En Mérida existe el Centro de Investigaciones y Estudios de Antropología Social. Uno de los 28 Centros de Investigación Conacyt. Exigente disciplina. Del 2010 al 2016. No se crea que es de repaso de fin de semana. ¡Qué va!
“Conseguí mi grado académico. Me otorgaron una grata responsabilidad. Que acepté gustosa. Y abandoné apenas quince días después.
“Imposible la reconversión de una mujer de intensa vida política que deriva hacia la academia. Mis propios compañeros se opusieron.. Utilizaron todos los argumentos. Que mi edad era impedimento. En ese entonces andaba yo en los 65. Luego argumentaron que no tenía publicaciones en revistas de prestigio. Y tampoco libros.
Y la tercera razón fue irreductible: “Había pertenecido y hasta encabezado al PRI. Había sido Presidenta del Comité Ejecutivo Nacional del PRI. Y entonces sin más declaré: “Sí. yo soy del PRI”. Y les entregué mi renuncia. Alcance mi rango académico con una tesis sobre el abandono del estado de la actividad henequenera.
“¿Extrañará su tiempo de legisladora, doctora Sauri Riancho?
“No. Cuando concluyo una tarea cierro la puerta y olvido”
Mientras se prepara para salir, añade que la nostalgia es una debilidad que ella simplemente no se puede permitir.
Y dijo adiós. Su lugar en el centro de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados en San Lázaro la esperaba.