Regidor de Educación, acusado de lesiones
La víctima, una maestra de telesecundaria, lo denunció pues teme por su integridad y la de su familia
El sujeto,
Una maestra de Telesecundaria teme por su vida, al ser violentada por su expareja sentimental, también docente e incluso regidor de educación en el municipio de Santo Tomás Hueyotlipan. La víctima no sólo teme por su integridad, sino también por la de su familia, por lo que ya presentó la denuncia correspondiente por el delito de lesiones y violencia familiar.
En entrevista con este medio, Mayra Karina detalló que conoció al sujeto identificado como Edgar N en agosto de 2020, cuando llegó a realizar su servicio social en la Telesecundaria José María Morelos y Pavón del municipio de Chilchotla. En ese momento, el varón ya era profesor en dicha escuela.
Ante la llegada de la pandemia por Covid-19, se suspendieron las clases presenciales, por lo que ambos fueron confinados en sus respectivas viviendas, desde donde realizaron sus clases en línea.
Para entonces, la pareja sólo se comunicaba por llamadas telefónicas y mensajes en redes sociales; no obstante, a principios de 2021, se reencontraron y formalizaron su noviazgo.
“El era muy agradable, respetuoso, incluso me llegó a presentar a sus papás (…), sin embargo, a los pocos meses comenzó a cambiar su actitud, se volvió controlador, sin motivo aparente se molestaba y comenzaba a insultarme (…); se ponía celoso de que yo practicara danza”, agregó Mayra Karina.
En agosto del 2021, a ella le dieron su plaza como maestra en el municipio de Cuetzalan, mientras que a él le dieron el cargo de regidor de educación en el municipio de Santo Tomas Hueyotlipan, donde su tía es la actual presidenta municipal. Por ello, ambos se veían los fines de semana, ya sea en Cuetzalan o en la ciudad de Puebla, pues en ambas partes reside ella.
POR POCO LA AHORCA
Como se mencionó líneas arriba, Mayra Karina, de 29 años, practica danza prehispánica, actividad que derivó que también se dedicara a vender artículos tradicionales de Oaxaca, por lo que en marzo de este año fue a dejar un mezcal a un cliente en la unidad habitacional Xilotzingo.
Cuando regresó a su casa, en la ciudad de Puebla, él ya la estaba esperando. Con evidente aliento etílico, el sujeto se mostró molesto porque según se había tardado demasiado tiempo.
En un arranque de celos, le arrebató su celular para revisarlo, pero como no pudo la tomó del cuello y estuvo a punto de ahorcarla, hasta que la mamá de la joven, logró que la soltara.
Él se tranquilizó y dijo estar arrepentido, pero ella decidió llamar a sus padres de él y así poco después llegaron para llevárselo. Desde ese momento, terminó su relación sentimental con el sujeto para evitar más agresiones.
VOLVIÓ A ESTAR EN PELIGRO
La profesora narró a El Sol de Puebla que acudió del 18 al 22 de abril de este año al estado de Oaxaca; el mismo 22 de abril, Edgar asistió al estadio Cuauhtémoc a un partido del equipo de futbol Puebla.
Al terminar el encuentro, él le llamó para ver si ya había llegado, pues sabía que venía de regreso a Puebla; como le contestó que venía en camino, el sujeto se ofreció para ir por ella a la Central de Autobuses de Puebla (Capu) y llevarla a su casa.
Mayra Karina se negó, pero él insistió y aseguró que sólo quería hablar con ella para que le regresara sus cosas que había dejado en Cuetzalan. Por lo anterior y para evitar problemas, la maestra permitió que pasara por ella a la Capu, donde le aclararía que lo único que había de él era una licuadora, un desodorante y una mesa de madera.
Cuando llegó Edgar, Karina notó que nuevamente traía aliento etílico y ya no quiso subirse a su camioneta Ford, tipo Ecosport; sin embargo, él le insistió y para evitar un escándalo en la calle, ella accedió.
Calles adelante, agregó Mayra Karina,
Edgar se detuvo para comprar unas cervezas y aunque ella quiso bajarse, él le puso los seguros para que no abriera; regresó y volvió a circular sobre el Bulevar Atlixco ingiriendo las bebidas embriagantes.
En esos momentos, el sujeto le pidió que retomaran su relación sentimental y como ella se negó, aceleró y le dijo que entonces “se los iba a llevar la ching… a los dos”.
Al llegar a la carretera federal a Atlixco, a la altura del kilómetro 13, en inmediaciones de Chipilo y cuando ya era cerca de la medianoche, totalmente alterado, el varón le dijo que se bajara pese a que el vehículo iba en marcha.
Poco después se orilló y estacionó, al tiempo que le gritaba que se bajara; ella le pidió su maleta que llevaba, pero él comenzó a jalonearla del brazo, se negó a darle sus cosas e intentó bajarla a la fuerza.
La víctima agregó que Edgar de manera violenta se bajó y caminó al lado del copiloto, a ella le dio miedo y se pasó al lado del conductor para bajarse por esa puerta, cruzar la calle, mientras él se volvía a subir a su vehículo.
Fue entonces que ella caminó para buscar un lugar seguro, pero en eso volvió a alcanzarla, se bajó del coche y sin más la empujó hacia la banqueta, para luego empezar a golpearla, dándole incluso, patadas en la cabeza y demás partes del cuerpo, hasta que pasaron los ocupantes de un automóvil, quienes se detuvieron para decirle que dejara a la joven y reclamarle por qué le pegaba. El sólo contestó que estaba ebria.
Los hombres continuaron su camino y eso lo aprovechó Edgar para seguirla golpeando, pese a que ella le pedía que llamara a una ambulancia.
Al ver que nuevamente regresaban las mismas personas del mencionado vehículo, dejó de golpearla y trató de subirla a su vehículo, al tiempo que ella gritaba que llamaran a una ambulancia porque se sentía mal.
Al ver que los ocupantes del mencionado vehículo se bajaron en su auxilio, Edgar subió a su camioneta y se marchó del sitio. Karina logró comunicarse con su familia, quienes llegaron por ella y se hicieron cargo después de llevarla al hospital del ISSSTE, donde recibió atención médica. Después acudió a la Fiscalía de Violencia de Género para presentar su denuncia y extendieron una orden de restricción para que Edgar no pueda acercarse a ella. Aun así, ella teme que le pueda hacer daño, pues la amenazó y le dijo que iba a ser daño mediante sus influencias en Santo Tomás Hueyotlipan. Por lo anterior, la mujer decidió hacer público el caso y pide a las autoridades que se haga justicia por la agresión que sufrió y señala a Edgar de todo lo malo que le pueda pasar de ahora en adelante a ella y a su familia.
MAYRA KARINA A los pocos meses comenzó a cambiar su actitud, se volvió controlador, sin motivo aparente se molestaba y comenzaba a insultarme”