Violencia maldita
OPINIÓN
Golpes, agresiones verbales, feminicidios, asesinatos tumultuarios, es lo que nos ha tocado vivir en esta generación globalizada, justamente cuando estamos en la etapa donde la mente del ser humano se acomodaba a sus ideas naturales, para emprender su vida cotidiana después de estas pandemias.
Las mentes perversas que han brotado como las malas hiedras, y han caído en la depresión, en la ansiedad incluso que han llegado a trastorno mentales, que les ha permitido abusar de la niñez, de mujeres, de personas de la tercera edad y de las oportunidades de encontrarse con víctimas que viven en total desamparo.
La frase de ¡¡No puede ser!! Ya no existe, porque hoy, todo puede llegar a suceder. Hoy nuevamente los estudiantes de la escuela estadunidense, “Roob Elementary School” situado en la provincia de Uvalde del Estado de Texas, fue escenario del asesinato masivo de 21 escolares de primaria.
Perpetrado por un joven de 18 años de edad de nombre Salvador Ramos, de origen latino, quien antes del atentado había herido de muerte a su abuela con un disparo en pleno rostro, para después robar su auto y estrellarlo en la escuela donde minutos después llevó a cabo la masacre.
¡NO PARAN LOS FEMINICIDIOS!
En tiempos del Morenovallismo en esta ciudad de Puebla se empezó a pedir la famosa “Igualdad de género”, debido a los múltiples asesinatos a mujeres que ya se empezaban a incrementar y que finalmente se otorgó el 22 de Agosto del año 2008, ¿Y qué paso? Que el machismo se reforzó las mujeres se manifestaron y se incrementaron los feminicidios.
Tal vez como sociedad no hemos logrado asimilar, pero sobre todo poner la debida atención para salvaguardar la integridad física y respeto a las mujeres, pero entender bien el mensaje que dice ¡Igualdad de Género! es decir varón y mujer en igualdad de circunstancias, debemos respetar esta máxima.
Pero mientras esto llega a una feliz conclusión, seguimos con este grave problema, cada mujer que es asesinada, la sociedad se viste de luto, ya hemos visto que a plena luz de día los asesinos actúan con toda impunidad, como es el caso del feminicidio perpetrado en la persona de la activista Cecilia Monzón Pérez.
Que al igual que otras como Zyanya, Mara, Paulina, Rubí, Úrsula, Leonor, y así podríamos acabar con el espacio, lo importante de esta grave situación es que las autoridades no dan una solución. Sería necesaria una labor titánica pero indispensable.
Incluir a la sociedad entera como aquella publicidad de hace años dirigida a los niños, hoy podría ser importante para las mujeres en donde decía “Cuéntaselo a quien más confianza le tengas” Familiares, amigos o vecinos, pareciera infantil pero se podría salvar la vida de una mujer.