No hay que echarse la culpa en un choque

Recientemente me consultó un individuo que fue víctima de un siniestro vial, en el cual su automotor salió dañado, al igual que su integridad física, ya que sufrió un esguince de primer grado. La víctima cuenta con una póliza de cobertura amplia y quien le pegó no cuenta con seguro alguno. Es el caso de que el responsable del siniestro ofreció pagar el deducible, a cambio de que el asegurado asumiera la culpabilidad, para que así se reparasen los dos vehículos. Al momento de consultarme le señalé que no debería hacer eso por los siguientes motivos.

Hay ciertos rumores y leyendas urbanas que suponen que es muy fácil “montar” un choque, para que así el seguro pague los daños, sin embargo, recordemos que los ajustadores son personas con bastante práctica y detectan esta irregularidad, además de que puede haber alguna comisión para estos por rechazar un siniestro.

También hay que señalar que no es tan fácil eso de asumir una responsabilidad, ya que se tienen que observar la señalética de la calle o crucero, los videos que pueda haber, la posición de los vehículos y otros factores, por lo cual no es suficiente que una persona diga que es culpable y así querer que su seguro pague el daño.

También hay que decir que la falsedad en una declaración, aun siendo ante un ejecutivo de empresa privada, como lo es el ajustador, es una causal para que la compañía no se haga cargo de los daños. Es sabido que se puede acudir a alguna autoridad administrativa, como la Condusef, pero en el momento de un siniestro y quizá con el riesgo de ser detenido, eso resulta muy impráctico.

Si alguien no tiene seguro y provoca un choque, pues es culpa de él, por lo que el hecho de querer ayudar resulta contraproducente. Es cierto que, si el vehículo responsable no cuenta con una póliza, las cosas se pueden complicar más, pero recordemos que hay coberturas donde no se paga deducible si hay un tercero responsable, identificado y denunciado, así que es mejor decir la verdad al ajustador, ya que este tiene la obligación de defender al asegurado, no solo por el servicio que obligadamente tiene que dar, sino también porque también va a cuidar el dinero de la compañía.

No podemos olvidar que la existencia de cualquier arreglo con el tercero es causa de nulidad en la prestación del servicio, así que no hay que aceptar trato alguno hasta que llegue el ajustador, quien cuenta con el conocimiento técnico y legal para arreglar el problema. Recalco, siempre hay que contar con un seguro, cuyo costo no es barato, pero siempre será menor a un siniestro

Como siempre, cada caso es distinto y requiere un estudio particular, si usted tiene un problema legal nos puede consultar telefónicamente y lo atenderemos sin costo alguno.

Dudas, comentarios o consultas 22 25 64 75 05; justicia_editorial@hotmail.com; síganme en facebook por mi nombre y en twitter: @vicente_aven. *Doctor en Derecho, consultor legal, abogado postulante y académico universitario.