Poblanos se suman al llamado nacional para defensa del INE
En la concentración estuvieron presentes los dirigentes del PAN, PRI y PRD, Augusta Díaz de Rivera, Néstor Camarillo y Carlos Martínez
La implementación del Plan B de la reforma electoral que propuso el presidente Andrés Manuel López Obrador provocó una segunda movilización en Puebla, en menos de un año, para defender la autonomía del Instituto Nacional Electoral (INE).
Una hora antes de la cita, que fue convocada a las 11 de la mañana, alrededor de tres mil personas comenzaron a reunirse este 26 de febrero en el Zócalo de Ciudad de Puebla para mostrar el apoyo al árbitro electoral bajo el lema "Mi voto no se toca" y pedir a la Suprema Corte de Justicia de la Nación invalidar el Plan B.
Los minutos pasaban y la plaza principal de la ciudad de Puebla se pintaba de rosa y blanco, colores representativos del órgano electoral nacional y símbolo de los manifestantes.
Mientras integrantes de la organización “Unidos, Sí por México”, con representación local, liderado por Moroni Pineda Monroy, alistaban la tarima para los oradores, otros más repartían carteles, playeras y sombrillas de color rosa y con consignas a favor del órgano electoral nacional. Además, colocaban una mesa para recolectar firmas con la finalidad de sumar voces y expandir el llamado a la SCJN para que anule la propuesta de López Obrador.
Bajo el lema “El INE no se toca”, la multitud se reunió a un costado de la Catedral de Puebla para escuchar algunos discursos, entre ellos el de Moroni Pineda, quien también es suplente del diputado federal del PAN Humberto Aguilar Coronado.
El representante de la organización señaló que la concentración fue ciudadana y no existió un ‘acarreo’, acción que es una muestra del rechazo a la propuesta presidencial.
Al mismo tiempo, declaró que los cambios legislativos vulneran la independencia del órgano electoral nacional, ponen en riesgo la vida democrática del país pues abre la puerta para imponer una dictadura.
“Esta lucha es por México, es por nuestros hijos y es por la democracia (…) El INE sí sirve y nos ha traído democracia y paz social, quieren controlarnos otra vez a través de las elecciones y por eso decimos el INE no se toca”, sentenció mientras los manifestantes coreaban la consigna a favor del órgano electoral.
Los oradores que participaron en la concentración masiva coincidieron en la demanda a los magistrados de la SCJN para que resuelvan con objetividad y legalidad las acciones de inconstitucionalidad promovidas por partidos políticos, legisladores federales y ayuntamientos de diferentes entidades.
Asimismo, enlistaron las principales vulneraciones del llamado Plan B: la reducción de trabajadores de las juntas vocales del INE, la pérdida de capacidad regulatoria en materia de fiscalización, así como perder la capacidad en materia de propaganda gubernamental, operativa para instalar casillas, para trasladar paquetes electorales la noche de la jornada electoral y para capacitar a funcionarios electorales.
“Necesitamos que todos ustedes hagan una campaña social en favor de la democracia. Estamos en una batalla en donde nos jugamos el futuro del país, donde nos pueden esperar 40 años o más de autoritarismo, ¡No podemos permitirlo!”, sentenciaron.
La manifestación contra la aprobación de la reforma electoral finalizó poco más de una hora después de su convocatoria al ritmo del himno de México.
Al otro extremo del zócalo, frente a Palacio Municipal, un grupo de manifestantes adheridos al Frente Nacional Ciudadano (FRENA) también hacía lo propio, lo que evidenció una división entre organización ya que en la movilización de noviembre sí se integró a la mega marcha.
La ausencia del Frente Cívico Poblano, dirigido por Paola Migoya, también se hizo evidente en esta segunda marcha pues en la primera tuvo un enfrentamiento público con Moroni Pineda por el uso del micrófono.
ALIANZA “VA POR PUEBLA” SE SUMA A LA MANIFESTACIÓN
En la concentración también estuvieron presentes los dirigentes del PAN, PRI y PRD, Augusta Díaz de Rivera, Néstor Camarillo y Carlos Martínez, respectivamente.
En esta ocasión, los líderes no tuvieron problemas de protagonismos, como acusaron en la movilización de noviembre, ya que permanecieron juntos en un mismo sitio y pasar casi desapercibidos.
En entrevista, el trío de dirigentes remarcaron que la intención de unirse a esta marcha fue para decir no al Plan B, pues se busca eliminar la credibilidad de este organismo, dejando a un lado el asunto partidista.
En tanto que la diputada federal del PAN, Ana Teresa Aranda, condenó las declaraciones del legislador federal por Morena, Ignacio Mier Velazco, quien minimizó la movilización y dijo que las controversias en la Suprema Corte no procederán, toda vez que no cuentan con argumentos de lo que se estableció en las cinco leyes del Plan B.
“Es lo malo de Nachito, de no terminar la carrera, de no sacar su título; ahora habla de que las acciones que se están mandando no son sobre este tema, pues si nosotros no somos pendejos, lo estamos haciendo con conocimiento de causa y sabemos que tienen un apoyo legal”, expresó.
Asimismo, confío en que los magistrados de la SCJN se pongan “a la altura” de los ciudadanos al desahogar las controversias presentados por diferentes actores políticos.
“Vamos a hacer todo lo que esté a nuestro alcance. Nos costó 100 años construir la democracia de este país, así que con uñas y dientes lo vamos a defender”, finalizó.
En la concentración también estuvo presente la diputada federal del PRI, Blanca Alcalá Ruiz; la senadora, Lucero Saldaña; la secretaria de Igualdad Sustantiva del Ayuntamiento de Puebla, Karina Romero.
Así como los diputados federales del PAN, Carolina Beauregard y Mario Riestra; el diputado local Rafael Micalco y el alcalde de Puebla, Eduardo Rivera Pérez.
La manifestación contra la aprobación de la reforma electoral finalizó poco más de una hora después de su convocatoria al ritmo del himno de México