Despide Coxcatlán a tres de las víctimas
La tarde de ayer llegaron a su lugar de origen los restos mortales de quienes fueron a trabajar como jornaleros a Sonora
La falta de oportunidades para mejorar las condiciones de vida obliga a los jóvenes a salir de sus comunidades desde temprana edad; este fue el motivo por el cual cuatro jóvenes de diferentes partes de la Sierra Negra, viajaron a Sonora desde hace un mes para poder obtener 2 mil 500 pesos semanales; hoy 3 de ellos regresaron a casa en un ataúd y este día serán despedidos en el camposanto.
José Luis, hermano de Daniel –una de las víctimas-, mencionó que como la mayoría de los jóvenes que deciden trabajar en el norte del país, su hermano se fue con la ilusión de poder “juntar un dinerito durante los tres meses que estaría en Sonora”, era la cuarta ocasión que hacía este viaje, pues en el pueblo no hay donde trabajar.
Con la promesa de un pago de entre los 2 mil 500 pesos a 3 mil pesos semanales, así como alimentos y alojamiento, tan solo por empacar espárragos, fue como avisó a sus padres y de un día a otro se alistó para emprender el viaje. Fueron unos amigos que viajaron con él, quienes avisaron a sus padres que Daniel se había
2 MIL 500 pesos a la semana era lo que buscaban obtener los jóvenes como jornaleros
serán despedidos en el camposanto perdido en el mar y que posiblemente estaba sin vida.
Por otra parte, familiares de Iván y de Maricarmen platican exactamente lo mismo, pues señalan que al no haber cómo ganar dinero en sus comunidades, muchos viajan a las cabeceras municipales a trabajar en el campo, en casas o en maquiladoras, por lo que al saber que en el norte se paga tres veces más de lo que ellos pudieran ganar y que sólo basta ser mayor de edad, deciden ir a probar suerte.
Cerca de las 15:00 horas de ayer, las tres familias observaron la llegada de los tres ataúdes, cada uno en una carroza; eran escoltados por una patrulla. Los cuerpos fueron bajados frente a la presidencia municipal para que con documentos en manos, se les entregará a sus familiares el ataúd donde venía el cuerpo de su consanguíneo.
Los tres ataúdes fueron llevados a la iglesia principal para ser parte de una misa de cuerpo presente. El clérigo dijo que es necesario seguir rezando para que sea encontrado el cuerpo que aún falta, para que la familia tenga esa tranquilidad espiritual.