Lamenta Astudillo situación en Guerrero
ACAPULCO, Gro.- Poco más de 63 personas salieron la noche del pasado lunes del poblado de Tlaltempanapa, del municipio de Zitlala, entre ellos 35 menores de edad y dos mujeres embarazadas, porque hombres armados torturaron y ejecutaron a tres habitantes de esa comunidad, y les advirtieron que si no se iban les pasaría lo mismo, por lo que decidieron huir de la zona y llegaron a Copalillo.
Esta no es la primera vez que ciudadanos son obligados por grupos armados a desplazarse de sus comunidades, ya que en este mismo año familias enteras de varios municipios de la región de Tierra Caliente, entre ellos San Miguel Totolapan, huyeron y pidieron asilo en Atoyac de Álvarez, donde hasta el momento permanecen en albergues.
Esto ha provocado que organizaciones delincuenciales se apropien de varias hectáreas de tierra y sembradíos en las comunidades, mientras los legítimos dueños han abandonado su patrimonio para no perder la vida a mano de estos grupos que se dedican al secuestro y homicidio y quienes, además portan armas de uso exclusivo del ejército.
Durante su arribo al municipio de Copalillo, la autoridad de ese lugar les ofreció petates para dormir y alimentación, asimismo se les dio atención médica debido a que algunos de los menores de edad presentaban un cuadro de desnutrición.
Esta no es la primera vez que ciudadanos son obligados por grupos armados a desplazarse de sus comunidades