Calle 20 de Noviembre
Debido a esto, la calle que fue conocida por mucho tiempo con el nombre ‘del relojero’, recibió el actual de ’20 de noviembre’ en recuerdo y conmemoración del inicio de la revolución iniciada ese día y de la cual platicaré algo de su historia. Al igual que las calles de Irapuato, conocidas según un suceso característico, o persona o personas que hayan vivido en ellas, esta calle recibió el nombre ‘del relojero’ porque en ella vivía un relojero muy reconocido en la población. Hace años, por los setentas, varias personas de Irapuato –el editor y escritor señor Eulogio Rodríguez, el Dr. Raúl Hernández, el señor José Razo peluquero y yo, principal, aunque no únicamente-, nos dedicamos a incrementar el juegociencia, el ajedrez, único que conozco que no depende de la suerte, sino de la capacidad mental de cada jugador de él-, dándolo a conocer a todo el Irapuato de entonces.
La calle nacía en las orillas del rio Silao, actual Boulevard Díaz Ordaz, casi a un costado del actual centro comercial ‘FIESTA’. Bajaba de norte a sur cruzando calles producidas por los arroyos que formaba el rio Silao al desbordarse y de su sequedad, nacieron las siguientes calles: ‘Leandro Valle’ donde fue construida por el año de 1937 la ‘Fabrica de Cigarros Él Águila’ y pletórica de fruterías y joyerías; ‘Lerdo de Tejada’, todas estas calles plagadas de billares, farmacias, mesones y cantinas; ‘Quintana Roo’; ‘Álvaro Obregón’, anteriormente conocida como ‘calle de Barreto’; ’16 de septiembre’; ‘Zaragoza’, hasta terminar en la ‘Calzada de Guadalupe’. En algunos tramos de esta calle estuvieron casas industrias como, la ‘Fabrica de cartón’ Propiedad de Don José Toriello en una cerrada donde actualmente existen casas habitación, en frente de ella vivieron, en otra cerrada, durante un tiempo algunas de las familias Covarrubias y posteriormente ahí funcionó un centro de rehabilitación muy efectivo y necesario para Irapuato, ‘’El Cri’, al que llevamos varias veces a mi hermana Lola a que le fabricaran una pierna artificial; seguía el Hospital Civil, muy famoso y seguro, en él trabajaban casi
Buenos días. Continúo haciendo un