Más de diez año dedicada a la docencia
A pesar de los retos que enfrentan los docentes, tiene claro su objetivo de seguir formando profesionistas
La convivencia con los estudiantes y el constante aprendizaje que genera en las personas trabajos como la docencia, son los principales factores que más disfruta de su profesión la maestra Griselda Rodríguez Ramírez, y aunque una de sus mayores motivaciones radica en sus clases han sido fuente de inspiración para que sus alumnos y ex alumnos se decidan a estudiar psicológica, es consciente de que no todo es “miel sobre hojuelas” en esta carrera, sobre todo en la actualidad, en donde los estudiantes experimentan cambios generacionales que los vuelven más intolerantes a ciertos temas, una situación que la ha llevado a sentirse agobiada en diversas ocasiones, a pesar de ello, disfruta cada momento en las aulas, ya que considera, los jóvenes son una inyección de energía para los docentes.
La historia de la maestra Gris, (como le gusta que la llamen) comenzó hace tres años en la Preparatoria Salamanca y en una secundaria pequeña de la ciudad y posteriormente en la Universidad de León de esta localidad, luego de regresas al municipio tras quedar desempleada en León, lugar donde estuvo trabajando un buen tiempo.
“Primero entré a trabajar a la prepa Salamanca oficial y en una secundaria muy chiquita, entré con muchos nervios y todo, pero, poco a poco me fue gustando, me gustó estar ahí compartiendo conocimientos, pero desafortunadamente cerro, por lo que, dos años después entre a UDL, en donde he podido reforzar mis conoci
miento en psicología y al mismo tiempo mantenerme actualizada de todos los nuevos programas que salen, además de formar futuros psicólogos y en la prepa, la convivencia y energía que inyectan los alumnos”, contó para el Sol de Salamanca.
Pero, no todo a lo largo de trece años ha sido completamente fácil, pues,
, en donde, el internet y los dispositivos móviles, también se convirtieron en parte fundamental de la humanidad, pero también generaron que los estudiantes perdieran el interés por esforzarse en sus trabajos y a eso se sumó el cambio generacional, que parte de nuevas ideologías y ha llevado a la docente a cuidar en más de una ocasión lo que dice y como lo dice.
“En prepa también me estoy encontrando a alumnos que me hablan de tú y no me incomoda eso, sino más bien la intención con la que lo hace, como si realmente fuera alguien de su edad, en lugar de que se sienta la jerarquía, además, una de las cosas, que también es muy desgastantes para mí, es que últimamente nos enfrentamos a una intolerancia de parte de algunos alumnos a escuchar comentarios que se oponen a su forma de pensar, aunque el argumento que uno diga tenga lógica”, finalizó.
Sin embargo, esta situación, no se ha convertido en un factor clave para la docencia, pues, los buenos momentos que le ha traído este trabajo, son los que la mantienen fuerte en su objetivo, por continuar con la preparación de futuros psicólogos.
El reto más grande vino con la pandemia de la covid-19 y el confinamiento, que obligó a maestros como a estudiantes a modificar sus métodos de enseñanza