GASCHICOLEO, PROBLEMA QUE NO SE DEBE SOSLAYAR
En Guanajuato, una sombra creciente se cierne sobre el horizonte: el robo ilegal de gas LP a través de tomas clandestinas. Los datos recopilados por Petróleos Mexicanos (Pemex) revelan un preocupante aumento en el número de estas operaciones ilegales durante 2023, con un incremento del 28.5% en comparación con el año anterior. Esta tendencia plantea desafíos significativos no solo para la industria del gas, sino también para la seguridad y el bienestar de la población en general.
Durante el periodo de enero a diciembre de 2023, se registraron un total de 18 tomas clandestinas de gas LP en el estado de Guanajuato. Esto significa que, en promedio, aproximadamente cada 20 días y siete horas, se identificaba una nueva operación ilegal para extraer gas de los ductos de Pemex. Esta práctica, conocida como "gaschicoleo", se ha convertido en una preocupación cada vez mayor, no solo para la compañía petrolera, sino también para las autoridades encargadas de garantizar la seguridad y la legalidad en el estado.
Es especialmente preocupante el hecho de que Guanajuato se encuentre entre los siete estados con mayor concentración de tomas clandestinas de gas LP en el país. Si bien no alcanza los niveles alarmantes de estados como Veracruz o Puebla, donde se han detectado más de mil tomas clandestinas, el aumento constante en Guanajuato es motivo de preocupación y exige una acción inmediata y decidida por parte de las autoridades.
Salamanca, un municipio emblemático en la historia industrial de México, se destaca como el epicentro de este problema en Guanajuato, con seis tomas clandestinas detectadas durante todo 2023. Sin embargo, la problemática no se limita a una sola localidad; municipios como Celaya, Villagrán, Apaseo el Alto, Pueblo Nuevo, Pénjamo y Cortazar también han sido afectados por esta actividad ilegal.
Es importante destacar que el robo de gas LP no es un fenómeno nuevo en Guanajuato. Informes previos, como el revelado por Organización Editorial Mexicana en marzo de 2023, han documentado la existencia de redes delictivas dedicadas a esta actividad ilícita. Según estos informes, líderes del crimen organizado como José Antonio Yépez, alias "El Marro", han colaborado con elementos de la Guardia Nacional para facilitar el trasiego y la comercialización ilegal de gas LP en el estado.
La complejidad y gravedad de esta problemática exigen una respuesta integral por parte de las autoridades estatales y federales. Es necesario reforzar la vigilancia y la seguridad en los ductos de Pemex, así como mejorar la coordinación entre las diferentes fuerzas de seguridad para combatir eficazmente esta actividad criminal. Además, se deben implementar medidas preventivas y de disuasión, así como campañas de concientización pública para informar a la población sobre los riesgos y consecuencias del robo de combustible.
Asimismo, es fundamental investigar y perseguir a los responsables de estas operaciones ilegales, incluidos aquellos que puedan estar involucrados en la corrupción y el soborno de funcionarios públicos. Solo a través de una acción decidida y coordinada se podrá erradicar esta práctica y garantizar la seguridad y el bienestar de los ciudadanos de Guanajuato.
En resumen, el crecimiento alarmante de tomas clandestinas de gas LP en Guanajuato es un problema urgente que requiere una respuesta inmediata y eficaz por parte de las autoridades. Es necesario tomar medidas concretas para combatir esta actividad ilegal y proteger los recursos naturales, la seguridad y el bienestar de la población. El futuro de Guanajuato depende de ello.