Mosaico policromo en la Muestra Nacional de Teatro

Fernando Palma, con sus apenas 23 años tiene una rica historia de vida, que es un botón de muestra del policromo mosaico que se aprecia en la Muestra Nacional de Teatro, que en su edición número 42 sucede ahora, y hasta el próximo sábado 19 de noviembre, en la calurosa ciudad de Torreón, Coahuila.

Fernando vive en Cárdenas, Tabasco, donde ha ejercido su amor por el teatro a través de la enseñanza a niños y adolescentes en uno de los centros de iniciación artística, que el INBAL tiene por todo el país.

Al hablar, Fernando transmite su amor por el arte escénico y aunque todavía no posee una preparación académica en forma, sus palabras transmiten además de su pasión, su interés y gusto autodidacta en este terreno. Lo mismo cita a Bertolt Brecht y a Calderón de la Barca, que habla de las políticas oficiales en torno a la cultura... o la falta de ellas.

Él es uno de los integrantes del programa Jóvenes a la Muestra que fueron seleccionados de todo el país, para vivir la experiencia de estar en este encuentro que califica de “una oportunidad única”.

Cuenta Fernando que hace un par de meses fue despedido de su empleo, “por alentar demasiado” el gusto de sus alumnos para dedicarse a la vida artística. “Va a ser frustrante para ellos –le dijeron-- pues no podrán lograrlo, así que lo mejor es cortar por lo sano”. Y lo despidieron.

Ha protestado por ello, y está en espera de una solución a su favor, mientras tanto disfruta de la Muestra, aprende y se prepara para intentar ingresar a la UNAM a estudiar Literatura dramática y teatro.

Otra historia es la de Irving Marcelo Hinojosa, productor ejecutivo y musicalizador de la obra Flores rojas, que el grupo De La Mancha Teatro presentará el próximo miércoles en el teatro Alfonso Garibay.

Flores rojas cuenta la vida de los niños recolectores de amapola en la sierra de Guerrero, estado de donde son originarios Irving y su compañía teatral. Para llegar a este montaje varios de los integrantes del grupo viajaron y convivieron durante dos años con pobladores de esas zonas, quienes les contaron sus historias y ellos las han llevado a escena desde hace un par de años, pues pese a lo complejo del panorama, decidieron estrenar en medio de la pandemia.

Y el Covid fue uno de los males menores para ellos, pues al abordar un tema tan complejo han visto de cerca muchas de las aristas del asunto. Por ejemplo, el cultivo de amapola es considerado ilegal, pero para los niños que lo realizan es sólo un trabajo más, en muchos casos el único que pueden tener en las condiciones en las que viven. Sin embargo, hay un delito detrás, con todo lo que ello implica.

A este mosaico se suma don Nicolás, el amable anfitrión en la Casa Mudéjar, una de las sedes de la Muestra, quien eficientemente explica a quienes lo desean, la historia de este maravilloso edificio, e invita a todos a acudir a los eventos ahí programados.

O también la maestra en psicología que, año con año desde Aguascalientes, lleva a la Muestra a sus alumnos de la Universidad de las Artes a disfrutar “y aprender, eso es lo más importante para ellos”.

Así, los casi 800 mil habitantes de Torreón están viviendo la fiesta de la 42 Muestra Nacional de Teatro.