Ensilado, alternativa para alimentar ganado
El sector agropecuario es uno de los sectores que más padecen los embates del clima. La falta de lluvia reduce la cantidad y distribución de pasto disponible para la alimentación de los animales. Una opción para enfrentar esta problemática es el ensilaje, es un proceso de conservación del forraje por medio de la fermentación hace que se mantenga fresco durante más tiempo.
No solo es poseedor de elementos altamente nutritivos para ganado, sino es el método más efectivo para garantizar el alimento de los animales durante la escasez de pastos ya sea por sequías o por exceso de lluvias.
Gracias al proceso de ensilaje, que consta de una fase aeróbica y una anaeróbica, cuenta con un alto contenido de humedad que, junto con la compactación, desarrolla bacterias que acidifican el forraje, aumentando su valor nutritivo.
Teniendo en cuenta que es posible ensilar cualquier forraje, es importante mencionar que los mejores resultados se encuentran con maíz, sorgo y zacates. Durante la cosecha, hay que identificar el momento en que el forraje se encuentra con la mayor cantidad de nutrientes y humedad para una rápida fermentación.
El forraje debe de ser picado en trozos pequeños, en seguida se acomoda en capas, se aprisiona con un tractor, eliminando las cámaras de aire, después se cubre con polietileno y una capa de 15 centímetros de tierra.
El inicio de la técnica de ensilaje se cree que empezó hace 3,000 años debido a que en las ruinas de Cartago al norte de África fueron hallados restos de ensilaje de forraje que datan del año 1200 antes de Cristo. También en el museo de Nápoles en Italia, se exhiben pinturas egipcias de 1000-1500 antes de Cristo, mostrando las reservas de forraje semejando un silo de piedra.
Heidy Wagner