NIÑOS EN EL CAMPO
Motivada por e xplorar las distintas etapas de la inf ancia, así c omo las huellas que dej a cada experiencia para conformar la personalidad de los individuos, la direct ora Tatian a Hue zo apuesta en el documental El Eco por narrar un a hist oria distint a, donde ella misma no sólo se enfrent ó al ret o de ahondar en temas c omo la v ida y la muerte, sino t ambién a de scubrir distintas formas de narración.
La idea comenzó al terminar su filme Tempestad (2016); sin embargo, entre el desarrollo del proyecto se atravesó Noche de Fuego (2021), su primera ficción que la hizo ganar seis premios Ariel, entre ellos a Mejor Película; lo que la obligó a aplazar la cinta.
“Esta película nace de un a enorme necesidad de poder seguir hablando de México, de qué es México, de qué somos, de qué tenemos desde un lugar diferente al que ya lo había hecho, e sta ve z quería voltear la mirada hacia el cuidado de la tierra, hacia la crianza de los niños, la sorpresa que hay de descubrir el mundo de e stos pequeños que crecen en el campo, que se hacen adult os demasiado pronto porque adquieren responsabilidades desde muy pequeños”, afirmó la directora en una breve charla con medios de c omunicación de sde Berlín, donde presentó El Eco en la sección Encounters de la 73 edición del festival de cine.
“Es una película que habla de eso en el fondo, de esta herencia de los papás a los hijos, de la conciencia de saber quién eres, en qué mundo estás parado, en este caso el mundo campesino y de lo que implica, cómo se forja el carácter y cómo se forja una identidad para encarar la sobrevivencia tan difícil que hay en el mundo c ampesino en n uestro p aís”, agregó la cineasta.
La historia se desarrolla en la pequeña localidad de El Eco, en Chign ahuapan, Puebla a cuatro horas de la Ciudad de México. Se observa cómo los infantes enfrentan situac iones en el c ampo, la
Tatiana Huezo regresa al doc umental para exponer en las posibilidade s de de sarrollo de los infantes de ac uerdo al lug ar en el que n acen
condición de v ida, los pr oblemas económicos que atr aviesan, así c omo las constantes mudanzas de los habitantes para buscar una mejor vida.
“El Eco para mí simbólicamente significa lo que existe en este pueblo que es muy especial y que, de alguna manera, yo percibía que e s una forma de v ida asombrosa y llena de dificultades, pero que está en peligro, acechada por muchas c uestiones, empe zando por el ahogo económico, por la migración, por los depredadores, por los proyectos extractivos que ponen en peligro el territorio de tantos pueblos y comunidades desde hace ya muchos años.
“Realmente la película son pinceladas de contexto, el fantasma del peligro sobrevuela la v iolencia, pero e sta vez está totalmente fuera de cámara. El foco que puse en esta película fue desde un lugar y desde una mirada totalmente diferente de mis anter iores trabajos. Yo quería estar dentro de las casas, en la vida c otidiana, intent ando atr apar la grandeza y la magia que hay en los momentos cotidianos de la vida y aparentemente pequeños”, expresó Huezo.
La directora no se ape gó a un a es
tructura, como en sus trabajos pasados, incluso optó por no utilizar la voz en off o darle mucho peso a entrevistas como en los documentales clásicos; su objetivo es que el público atrape un pedazo de vida de esta comunidad.
“Otro de los temas intere santes e s que las mujeres de esta comunidad, que es bastante conservadora, no son personajes femeninos e státicos, se mueven de lugar, aprenden a decir: ‘oye esto no me gusta o hagámoslo de otra forma’; admiro a los hombres y mujeres de esta comunidad.
“Algo que ha llamado la atención es que todo el mundo me ha dicho que de alguna maner a e s un retr ato del matriarcado mexicano, que no se ve, del que no se habla y e so me ha llamado mucho la atenc ión, yo n unca hubiera tenido esa reflexión”, dijo.
Por el momento, el filme se e strenó en Alemania, al tener una coproducción con dicho país. Viajará a otros festivales como Cannes y Venec ia para de spués pre sentarse en Mé xico. Es posible que el e streno se lle ve a c abo el próximo año.