Mons. Arturo Antonio Szymanski Ramírez celebra hoy su onomástico
Incansable defensor de la Vida desde el seno materno hasta la muerte natural Un hombre sabio, prudente y disciplinado Promotor de la Teología del Encuentro
El primer Arzobispo emérito de San Luis Potosí, monseñor Arturo Antonio Szymanski Ramírez, celebra hoy con una Misa de acción de gracias sus 96 años de vida. Festejará su cumpleaños y onomástico. La concelebración Eucarística será hoy a las 9:00 de la mañana en la S.I. Catedral.
Sin duda, un Arzobispo lleno de profunda fe, alentada esperanza y vivificante caridad, que siempre se ha caracterizado por su evidente celo apostólico, su gran sabiduría y prudencia para actuar en todo lugar y momento, dejando evidenciar su gran cercanía con nuestro Padre Dios a través de la oración.
Un Arzobispo, que al igual que Su Santidad Juan Pablo II, se ha caracterizado por ser muy Eucarístico y Mariano, pues siempre aconseja que se persevere en los Sacramentos de la Penitencia y Comunión, y en el rezo del Rosario, la “oración mariana por excelencia” que nos lleva a un auténtico encuentro con Cristo a través de María, Madre de Dios.
Mons. Szymanski cumple hoy 96 años de edad, quien nació el 17 de enero de 1922 es autor de los ejemplares: “¿Has Encontrado tu Salmo?”, “Ecología Sexual”, “Ideario de Santidad Sacerdotal”, “Ideario de Santidad para Jóvenes”, “Ideario de Santidad para los Esposos” e “Ideario de Santidad para la Vida Religiosa”.
Un hombre lleno del Espíritu Santo, que siempre ha estado dispuesto a defender con valentía la vida desde su concepción hasta la muerte natural. Es evidente su lucha incansable por acabar --por todos los medios que le sea posible-con lo que se ha denominado la absurda “cultura de la muerte”.
Es considerado un incansable defensor de la fe, siempre ha estado en contra de todo tipo de violencia, sea verbal, sea física o emocional. Se ha caracterizado por promover la Teología del Encuentro.
Se ha preocupado y ocupado por promover la vida a través de sus escritos y por medio de sus elocuentes y sabias homilías que siempre escuchan con gran atención sus fieles, a quienes envuelve con sus palabras evangélicas, siempre llenas de amor a Dios en cada Misa que preside.
Monseñor Szymanski nos exhorta a defender nuestra fe con firme convicción y valentía, sin miedo “al qué dirán”, y quiere que se conozca más nuestra fe, que se difunda y se profundice cada vez más en ella, para que se ame y se valore, por eso desea que estemos evangelizamos, catequizados, preparados en la fe para después evangelizar a nuestros hermanos que no conocen a Cristo, o que no logran practicar con obras su fe católica.
La sola presencia de monseñor Szymanski inspira ternura, bondad. Desde este humilde espacio le enviamos nuestras más sinceras felicitaciones, un cariñoso saludo y fuerte abrazo, unidos en Cristo Jesús.
Los periodistas lo respetamos y lo apreciamos en demasía, valoramos realmente su prudencia, sus sabias enseñanzas y sabiduría inigualable, por lo que debemos sentir la bendición de Dios por contar con su amistad incondicional. Dios le conceda lo mejor del Cielo y de la Tierra y lo siga fortaleciendo en su Ministerio Episcopal.