EN BUSCA DEL PODER

Si en algo puede identificarse Jason Momoa con su personaje de Aquaman es su origen. El actor creció desde muy joven en Iowa, al norte de los Estados Unidos, pero su nacimiento se dio en Hawai, de donde su padre era originario; por otro lado, su mamá tenía ascendencia alemana e irlandesa y fue la única responsable de su crianza desde niño.

Es por eso que para Momoa interpretar a Aquaman, un superhéroe mestizo cuya madre reina el mundo acuático de la Atlántida mientras que su padre es un ser terrestre encargado de cuidar un faro, tuvo un lado especial, sobre todo de la mano de James Wan, el director.

“Yo soy mitad blanco y mitad café y el también viene de mundos distintos, pues es de Malasia con nacionalidad australiana, fue realmente bueno la mezcla de razas.

Creo que él podía entender los dos mundos distintos de donde ambos provenimos”, dijo el actor en una videoconferencia desde Nueva York.

Popularizado por su papel de Khal Drogo en Game of Thrones, Momoa comentó que su preparación para dar vida a Arthur Curry, alterego de Aquaman “fue un viaje muy largo, tomó mucho de entrenamiento, muchos dobles, comer bien y entrenar duro”.

Lo más difícil, según el actor, fue vestir el traje de del Rey de los Siete Mares y realizar la pelea final: “Pesa demasiado y teníamos la lluvia cayendo en la escena, eso lo hacía más pesado todavía como unas 40 libras (18 kilos). Cuando peleas eso es extremadamente difícil”, cuenta.

Aunque Aquaman ya había debutado en cine junto con Batman, Superman, Wonder Woman, Flash y Cyborg, el actor considera que esta cinta mostrará realmente el valor de este superhéroe. “La liga de la justicia era como un fin de semana para Arthur.

Esta es obviamente una historia de origen, de cómo se vuelve un superhéroe y cómo ayuda a otros”, comenta. En la cinta, Aquaman no sólo descubre su origen y sus poderes, sino también a su hermano el Rey Orm (Patrick Wilson) con quien se enfrenta para reinar la Atlántida, de donde proviene. Su personaje también debe sobrellevar la ausencia de su madre Atlanna, interpretada por Nicole Kidman y quien debe dejarlo para cuidar su integridad.

“Tener a Nicole Kidman es realmente increíble. Ella es uno de nuestros tesoros en la actuación, es una ganadora del Oscar. Sin duda elevó mi actuación a otro nivel, es una de las mejores”, recordó Momoa sobre su trabajo con la protagonista de Moulin Rouge