REINAUGURARON MURAL “LA INVENCIÓN DESTRUCTIVA”
Por el centenario de la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos (Concamin), creada el 13 de septiembre de 1918, y por el cumpleaños 90 del pintor y escultor Felguérez , el mural, cuyo nombre genérico es “La invención destructiva. La Máquina del Octavo Piso”, fue remozado.
Manuel Felguérez, autor de la obra, asegura que “cumplir 90 años es una idea terrible, pero más vale cumplirlos y tenerlos, que no llegar a ellos” El mural “La invención destructiva”, obra que el maestro Manuel Felguérez realizó para la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos (Concamin) hace más de medio siglo, fue reinaugurada tras ser restaurada por un equipo de expertos.
Como parte del programa celebratorio por el centenario de esa organización nacida el 13 de septiembre de 1918, y por el cumpleaños 90 del pintor y escultor Felguérez (Zacatecas, 12 de diciembre de 1928), el mural, cuyo nombre genérico es “La invención destructiva. La Máquina del Octavo Piso”, fue remozado.
Durante la ceremonia respectiva, realizada en el célebre octavo piso del edificio sede de la Concamin en esta ciudad, el siempre hilarante artista plástico señaló sin hacer a un lado su eterno buen humor que “cumplir 90 años es una idea terrible, pero más vale cumplirlos y tenerlos, que no llegar a ellos”.
Por su parte, el presidente de la Concamin, Francisco Cervantes Díaz, explicó que a poco más de medio siglo de elaborada, “La invención destructiva” mantiene una importancia capital en la historia del arte mexicano, al ser una pieza representativa de la Generación de la Ruptura a la que pertenece Felguérez.
Dando la espalda a la obra y de frente a numerosos personajes del mundo empresarial mexicano, dijo que la obra monumental fue realizada con materiales poco tradicionales para una representación plástica. “Esta obra manipula partes de maquinarias para crear una obra mural de enorme belleza plástica y armonía”.
Y también, abundó el presidente de los industriales organizados del país, representa una propuesta discursiva, un claro cuestionamiento al progreso al deconstruir la máquina de su objetivo utilitarista y dirigirla hacia uno más subjetivo y abierto al diálogo con el espectador de las generaciones siguientes.
En ese sentido, el autor de la pieza de grandes proporciones explicó que en el México de los años 60 se comenzó a poner en boga el término smog. Tituló así a su mural porque consideró que la contaminación era generada básicamente por el avance de la industria, quien a la par de sus avances e inventos, destruye.
En 1964 el entonces presidente de la Concamin, Juan Sánchez Navarro, pidió a Manuel Felguérez que realizara un mural para el acervo de esa institución. Tiempo después, en 1973, ponderó el valor artístico, estético y cultural del mural al prologar la exposición “El espacio múltiple”, en el Palacio de Bellas Artes.
“Desde 1964 esa escultura ha dado identidad y hoy celebramos 100 años de la Concamin y 90 de vida del maestro Felguérez con la restauración y puesta en valor de este mural”, señaló Cervantes Díaz en su discurso de reinauguración, palabras que el artista homenajeado respondió con un mohín de agradecimiento.
Los trabajos de limpieza, fijado de piezas que lo conforman y la reintegración de colores originales de la obra, fueron coordinados por Lorena Zedillo Ponce de León y la restauradora Cynthia de la Paz Apodaca, por encargo de la Comisión de Cultura y Educación de la Concamin, que preside Heberto Gabriel Guzmán Gómez.