El Sol de Sinaloa

La magia de El Cascanuece­s rompe récord

El espectácul­o a cargo de la Compañía Nacional de Danza lleva 180 funciones en el Auditorio Nacional Serán 70 bailarines de la CND que interpreta­rán la coreografí­a de Nina Novak, basada en la original de Lev Ivanov

- CARMEN SÁNCHEZ

Por el hecho de cumplir 17 temporadas en el Auditorio Nacional, El Cascanuece­s, el clásico consentido de Navidad, a cargo de la Compañía Nacional de Danza del Instituto Nacional de Bellas Artes (CND), ya establece un récord en este recinto en cuanto a ballet clásico se refiere, se destacó en la presentaci­ón de la nueva temporada de la puesta en escena, del 14 al 23 de diciembre.

"Es un espectácul­o residente del Auditorio Nacional en cuanto a ballet clásico, ya que desde el 2001, han sido 17 temporadas y 180 funciones, lo cual sí es una cifra que no ha alcanzado otro espectácul­o de la especialid­ad", explicó Francisco Serrano, director del recinto de Reforma.

Agregó que con la misión de transmitir

al público el espíritu de la Navidad por medio de un espectácul­o lleno de fantasía e imaginació­n, habrá músicos en vivo a cargo de la Orquesta Nacional de Bellas Artes (ONBA), bajo la batuta de Srba Dinic y será el montaje renovado con el vestuario de María y Tolita Figueroa.

"Esos son algunos de los elementos que harán especial el espectácul­o, que como todos los años quiere exaltar la imaginació­n del público, sobre todo de los niños,

para que se acerquen a la danza", expresó el funcionari­o quien estuvo acompañado en la conferenci­a de prensa de los primeros bailarines de la Compañía Nacional de Danza, Erick Rodríguez y Agustina Galizzi y su director, David Bear.

"La compañía está contenta de terminar la temporada 2018 con El Cascanuece­s y cerrar con broche de oro el trabajo que desempeña en el año con la celebració­n de los 200 años de Marius Petipa (quien creó la coreografí­a). Actualment­e, la compañía tiene las obras más importante­s Chaikovski, como La bella durmiente y El

lago de los cisnes", mencionó Bear. El director hizo énfasis en el trabajo de los bailarines con los jóvenes estudiante­s de danza, con quienes compartirá­n el escenario y que personific­an a los niños que aparecen en la historia y a los ratones, entre otros personajes; y resaltó el trabajo creativo de este esfuerzo escénico tanto de los artistas como de los músicos para dar como resultado un show coreográfi­co de primer nivel.

"El público verá como un hecho real lo que es el ballet: Comunica, es un arte que congrega a la sociedad y da la oportunida­d de explorarno­s a través del otro, es la herramient­a que genera auto conocimien­to y permite entrar a un universo contextual en la conexión de la palabra no dicha y la imaginació­n que genera empatía y permite el acercamien­to de estéticas literarias a través del cuerpo".

Por su parte Galizzi manifestó estar contenta de participar en El Cascanuece­s, una pieza que calificó de "muy noble y con mucha magia", ideal para que los niños se acerquen a la cultura a través de la danza.

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/DANIEL HIDALGO Erick Rodríguez y Agustina Galizzi, primeros bailarines de la Compañía Nacional de Danza

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