Refutan freno a la política energética
La Presidencia de la República, la Sener y el Cenace acuden a un tribunal federal contra Greenpeaceméxico
México, con
Calto potencial para producir energía renovable
Sol de México
DMX. La Presidencia de la República, la Secretaría de Energía (Sener) y el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) impugnaron ante un tribunal federal la suspensión que paralizó todos los efectos y consecuencias de los acuerdos que frenan la inversión en energías limpias y que marcan las pautas de política de confiabilidad seguridad, continuidad y calidad en el Sistema Eléctrico Nacional.
Lo anterior, luego de que el juez especializado Juan Pablo Gómez Fierro concedió el viernes pasado una suspensión provisional a Greenpeaceméxico en el que explica que, para no generar un vacío normativo, las autoridades responsables y vinculadas al cumplimiento de esta determinación deberán aplicar las disposiciones que se encontraban vigentes previamente a la expedición de dichos acuerdos.
Hasta hace una semana ninguna empresa privada había promovido amparos contra el acuerdo de la Sener sino que se habían limitado a impugnar la orden del Cenace que ya fue suspendida por tiempo indefinido por dos jueces, entre ellos Gómez Fierro, en be
hace una semana ninguna empresa había promovido amparos contra el acuerdo de la Sener
neficio de alrededor de 50 compañías.
Incluso, el propio juzgador frenó el intento del director jurídico del Cenace para que no analizara, por una supuesta incompetencia, el amparo promovido por GreenpeaceMéxico.
Para este viernes estaba programada la audiencia en la que se resolvería si el juzgador concedía una suspensión definitiva a la organización ambiental para detener por tiempo indefinido las políticas en materia de energía de la Sener sin embargo, la audiencia fue diferida.
El diferimiento de la audiencia y el que aún no se resuelva sobre la suspensión definitiva beneficia al Gobierno de México, pues da más tiempo al tribunal colegiado especializado para resolver sobre al suspensión provisional y, en su caso, revertir la parálisis que hoy tiene la política de energía de la 4T.