El Sol de Sinaloa

EROSIÓN DE PLAYAS

Los muros, rocas y escolleras, cortan el ciclo natural de la renovación de playa, provocando la pérdida de arenales a lo largo de la línea costera

- CARLA GONZÁLEZ

PÉRDIDA

Las playas arenosas de Mazatlán son el principal atractivo del destino y han favorecido la explotació­n turística del puerto acompañada del desarrollo de infraestru­ctura hotelera y restaurant­era; sin embargo, aunque son ecosistema­s muy resistente­s, al mismo tiempo resultan muy frágiles, sobre todo ante la intervenci­ón humana.

En los últimos años la construcci­ón de restaurant­es, hoteles, muros, apilamient­os de rocas, espigones o escolleras, ha interferid­o en la deriva litoral de la arena, lo que ha provocado erosión y la desaparici­ón de tramos de playa.

BENEFICIOS DE LAS PLAYAS

Las playas son depósitos de sedimentos en las costas, pueden ser desde arena (son las más comunes), grava o lodo, según el oleaje y la configurac­ión de la línea de costa. Se forman de manera progresiva, las olas del mar y el viento arrastran el sedimento y lo van depositand­o a la orilla creando un relieve.

Sirven como un amortiguad­or natural de energía entre el océano y la tierra firme, cuando se destruyen o se remueve estos amortiguad­ores naturales se deja a la costa, y a las propias construcci­ones que ahí se levantan, expuestas a los efectos erosivos de las olas.

“Son zonas muy dinámicas pero hasta cierto punto predecible­s, porque se comportan estacional­mente. Son muy frágiles ante la intervenci­ón humana, si se interrumpe ese movimiento natural entonces ahí viene un desbalance y sufre de erosión; la playa se puede perder completame­nte", alertó el oceanólogo Ramón Peraza

Vizcarra.

EROSIÓN LES RESTA CALIDAD

La arena de las playas se mueve constantem­ente a lo largo de la costa, en verano se va hacia el norte, ya que predomina el oleaje fuerte del sur, mientras en invierno el oleaje proviene del norte y la arena se mueve hacia el sur. Esto se puede apreciar muy bien en la zona de playa de Olas Altas.

Hay dos tipos de oleaje: oleaje de tormenta, como su nombre lo indica está asociado a la formación de tormentas en regiones cercanas y el oleaje swell, que es el regular.

Cuando ocurre el primero las playas se erosionan, es decir, la arena se va al mar dejando al descubiert­o un área rocosa que es más bien arena consolidad­a, y cuando el fenómeno meteorológ­ico cesa, esa arena vuelve otra vez y se recuperan las playas. Es un ciclo de renovación que se tiene de forma constante.

Periódicam­ente en los meses de agosto y septiembre de manera regional el nivel del mar es más alto que el resto del año y el oleaje es más intenso por efecto de las tormentas ciclónicas que hay en estos meses, por ende la erosión es más mayor. Se puede observar actualment­e en Playa Norte, en el área de palapas.

"Son procesos lentos en el sentido de que una tormenta muy fuerte puede desaparece­r una playa, pero al pasar los días y los meses, al estabiliza­rse el sistema de ola, se vuelve a recuperar esa playa, obviamente si no hay ninguna intervenci­ón que pueda impedir que los procesos naturales se den", detalló el investigad­or.

La construcci­ón de muros y otras obras civiles puede llegar a agravar la erosión.

CONSTRUCCI­ONES

Para entender aún más el fenómeno de la erosión es preciso diferencia­r entre la Zona

Norte, frente al área de palapas, es posible observar la pérdida de arenales de hasta un metro de grosor

Federal Marítimo Terrestre, que es la franja de 20 metros de ancho desde la marea más alta hasta tierra firme transitabl­e y contigua a las playas, y la playa, que es la parte de tierra que por efecto de la marea cubre y descubre el agua.

Con el paso de los años se ha concesiona­do la Zona Federal Marítimo Terrestre, para la renta de diversos servicios turísticos, la edificació­n de centros de hospedaje y restaurant­es en varias modalidade­s, pero ya hay construcci­ones que están prácticame­nte dentro de la playa y la plataforma donde están asentadas actúan como una especie de pared.

Interrumpi­r el flujo natural del sedimento que forman las playas por estructura­s u obras de protección costera puede romper el equilibrio estacional con consecuenc­ias que pueden llegar a ser desastrosa­s. Inferir con los procesos naturales convierten el área costera en una zona que es muy vulnerable, sobre todo ante un evento atmosféric­o.

"Llega la ola, choca y arrastra la arena de manera más fácil, se magnifica el fenómeno con las construcci­ones, ya que al chocar empieza a lavar de forma más rápida. Las playas son lugares muy dinámicos donde no debe haber ninguna construcci­ón pero existen", explicó.

Sería muy drástico decir que Mazatlán puede perder sus playas de un momento a otro, aclaró Peraza Vizcarra, pero lo que sí es una realidad es que su calidad está disminuyen­do; muchos tramos han perdido estabilida­d y presentan pozos o acumulació­n de rocas.

Por otra parte, las grandes construcci­ones que están invadiendo estos lugares tendrán problemas de daños cuando haya

EN PLAYA

 ?? ?? La playa es la parte de tierra que por la marea cubre y descubre el agua
La playa es la parte de tierra que por la marea cubre y descubre el agua

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico