¿Qué significa Nican Mopohua?
LLEGARON los españoles a estas tierras de América (12 de octubre de 1492). Fue el choque de dos culturas completamente distintas. España y los pueblos indígenas de estos pueblos. Los españoles vinieron en búsqueda de oro, tierras y mujeres.
La mentalidad cristiana de Hernán Cortés y sus acompañantes se horrorizaron al ver los sacrificios de seres humanos que se hacían a sus dioses, la idolatría, la sodomía y el canibalismo, etc.
Hernán Cortés repetía sus peroratas a estas costumbres, y les decían que eran una influencia y posesión del diablo.
España doblegó esta cultura y los pueblos de estas tierras mexicanas fueron dominadas por la espada, los caballos, los cañones y la cruz.
Tiempos difíciles para el indígena que perdió todo. Fue aplastado. Se les había arrancado el alma. Muchos indígenas preferían morir o emborracharse. Ya que para qué vivir...
En diciembre del año 1531 hubo un acontecimiento muy especial. El indio Juan Diego Cuauhtloatzin afirma que una mujercita que vino entre las nubes del cielo se les apareció y recibió un mensaje para el obispo gobernante fray Juan de Zumárraga: dice que la Señora, le encomentó, que le edificara una casa sagrada para ahí mostrar su amor a su Hijo.
Nican Mopohua... Aquí se narra, aquí se cuenta.
Son las primeras palabras en náhuatl, donde se narra este acontecimiento.
Este escrito o documento fue puesto por escrito pocos años después de las apariciones por un sabio indígena llamado Antonio Valeriano (años posibles 1545-1548), documento que según los entendidos es una verdadera joya de la literatura náhuatl (Miguel León-Portilla). El documento más antiguo de las apariciones guadalupanas.
Este hecho es sorprendente en muchos aspectos históricos, así como sus consecuencias al presente.
Este acontecimiento puso de pie a todos los habitantes de estas tierras.
¿Ya lo leyó usted? Si no sabe náhuatl, existen al presente varias traducciones al español. Escrito fundamental y básico para nuestra cultura y nuestra fe.
Juan Diego vivió en una casita hecha junto a la ermita o capilla donde se veneraba la imagen que la Virgen de Guadalupe plasmó en su tilma.
Juan Diego habitó junto a esta ermita, y él mismo contaba las apariciones a sus habitantes por 16 años, hasta su muerte.
Hay una multitud de testimonios históricos de este hecho: la imagen en la tilma tiene cosas sorprendentes, la tradición oral de las expicaciones de Juan Diego se regó como pólvora en aquellos tiempos. La multitud de gente que se convirtió a la fe cristiana. Los milagros. Los testimonios como el Nican Motecpana. Los testimonios de gente anciana en las investigaciones de 1666, etc., así como los que se oponían a estas “supuestas” apariciones.
Es bueno preguntarse, investigar o ver el presente. Ahí está la historia de México. Imagen que acompañó nuestra Independencia, nuestra Revolución y nuestra vida.
La verdad florece y brota la fe: el conocimiento del verdadero Dios. México empieza por Guadalupe.