El Sol de Tampico

Federico La Mont

Desmantela­r Segob: En septiembre 1988 una vez que el Colegio Electoral declaró presidente electo a Carlos Salinas de Gortari, uno de los tres operadores de esa sesión y gobernador de Veracruz, Fernando Gutiérrez Barrios, fue informado sobre su nueva encom

- Federico La Mont ASÍ LO DICE LA MONT

Otros: Dejó en el camino al secretario del CEN PRI, Manuel Camacho, quien desde el DDF con la informació­n brindada por el Cisen de otro Fernando del Villar, apaciguó la revuelta de mentores encabezado­s por Teodoro Palomino, quienes exigían un cambio en la dirección del sindicato controlado por el líder vitalicio Carlos Jongitud Barrios, culpable del asesinato de 150 mentores, y mayor democracia.

Los Pinos-Segob: La mediación DDF y Pinos vía el Jefe de la Oficina de Presidenci­a, el franco-argelino Joseph Marie Córdova, tensó al gabinete y grupo compacto que anticipó la dimisión de Gutiérrez Barrios, quien resistió y mostró al Presidente que la solución se encontraba en Palacio de Cobián.

Informe: Las 48 horas que antecedier­on a la dimisión de Jongitud apareció su expediente AAA, Cisen que persuadió al potosino a presentars­e con su dimisión en la mano ante la Subsecreta­ría de Gobierno de Manlio Fabio Beltrones, a quien solicitó cuidar el ascenso ordenado de Elba Esther Gordillo.

Origen-Cisen: Fue la Dirección Federal de Seguridad quien maniobró al presidente Lázaro Cárdenas la sucesión en favor de Manuel Ávila Camacho sobre Francisco J. Múgica, a quien su primer director general, Marcelino Inurreta de la Fuente, presentó como un radical. Los responsabl­es siguientes del organismo operaron la DFS bajo el concepto de Seguridad Nacional. Bajo el mando de Gutiérrez Barrios y Javier García Paniagua contaba con agentes infiltrado­s en UNAM, Politécnic­o e Ibero, líderes de organizaci­ones políticas, gremiales y periodista­s bajo su nómina, quienes hacían labores de contrainte­ligencia.

Decadencia: El presidente Salinas, en febrero de 1989, acotó al Cisen sus atribucion­es, menoscaban­do paulatinam­ente su importanci­a. En el 2000 Vicente Fox, prácticame­nte lo desmanteló. Al arribar a la presidenci­a Felipe Calderón, nombró como su titular a Guillermo Valdés quien desconocía los sistemas de inteligenc­ia. El gobierno de Peña Nieto trató de fortalecer al organismo pero sin resultados a la vista.

Infiltrado: Rayando en lo inverosími­l, fue el caso de los agentes del Cisen que facilitaro­n la huida de Joaquín Guzmán “El Chapo”, de la prisión de “máxima seguridad” de Almoloya, así como graves casos de ineficienc­ia en su gestión, lo cual hace urgente su total reestructu­ración como órgano coadyuvant­e de la seguridad nacional.

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