“El Onceavo cielo”
Su creación lo hizo merecedor a dos de los premios internacionales más importantes este 2020 y se prepara para ingresar a la Yale School of Music en New Haven, Connecticut
Definiéndose como una persona curiosa, interesada por aprender todo tipo de cosas, con intereses muy diversos especialmente todo aquello relacionado con la construcción de conceptos que transmitan su sentir, inspiración y motivación, es como inició su charla con EL SOl DE TAMPICO Julián Fueyo.
El destacado compositor de música clásica tuvo la oportunidad de estudiar en el Interlochen Arts Academy en Michigan, posteriormente ingresó al Cleveland Institute of Music y está a punto de iniciar su maestría en la Yale School of Music con el fin de seguir preparándose y conocer todo lo relacionado con la música clásica contemporánea.
EL INICIO DE LA CARRERA
Con tan solo 2 años y medio de edad Julián Fueyo inició sus estudios de violín bajo la instrucción de la reconocida Mtra. María Teresa Cortinas, a los cuatro años descubre sus habilidades al piano junto al Mtro. Jesús González Guerrero, sin darse cuenta que poco a poco iniciaba su camino en la música
“Esto inicia gracias a la Mtra. María Teresa Cortinas, con ella aprendí violín con ella estuve hasta que cambió de residencia, yo tendría como 12 o 13 años, seguí mi preparación con Arturo Esquivel, también tomé clases de piano y composición, realmente nunca me he despegado de eso, de la música”, describió.
Julián recuerda que conforme adquirió conocimientos y fue aprendiendo obras de los grandes compositores, él buscaba darle más seriedad a la música, emprender y aprender nuevos retos, todos girando en ese mismo entorno que resultaba incierto: la composición.
“Quería darle más seriedad a la música pero no sabía cómo, estudiaba violín, piano, empecé a practicar más, pero me di cuenta que eso no era para mí, le dedicaba horas de estudio a cada instrumento pero se estaba convirtiendo en un proceso mecánico, poco creativo y empezaba a improvisar mientras practicaba”, recordó.
Comenta que la improvisación durante sus horas de práctica lo hacían sentir mejor, descubriendo que lo que quería realizar era componer, descubrir nuevos sonidos, nuevas cosas más allá de las piezas de Mozart, Bethoveen, Bach, entre otros que en aquel entonces era algunos de los compositores que conocía.
“Me preguntaba ¿Qué pasó
con esa música por qué no se siguió componiendo?, claro yo no sabía que existía la música clásica contemporánea y al descubrirlo empecé a tomar clases con el Mtro. Ramón Alarcón, quien me orientó y mostró que sí existe la música clásica que tiene una vida y que se sigue haciendo”, comenta.
El recién egresado del Cleveland Institute of Music en Cleveland, Ohio, recuerda que al descubrirlo inició un largo camino de estudio, descubrimiento, investigación y creación de sus propias piezas.
EL ONCEAVO CIELO, SU CREACIÓN
Inspirada en la mitología prehispánica la pieza para orquesta creada por Julián Fueyo “El Onceavo Cielo”, es una obra muy extensa que aborda un tema cosmológico lleno de magia, que permite trasladar al público en un viaje bastante interesante y que llevó al artista cinco meses de dedicación para su elaboración.
“El Onceavo Cielo es una pieza que hice para orquesta inspirada en la mitología prehispánica que habla de los 13 cielos que hay, de los cuales el onceavo es en donde vive el Dios del Fuego, que también es el Dios del Origen del Tiempo, con una profundidad psicológica extensa a la que le dediqué mucho tiempo, en algún momento creí que no la iba a terminar”, describe.
Al mencionarle que si está pieza representa el origen de su carrera como compositor, con una sonrisa cálida Julián mencionó que no había pensado algo así, pero que sí lo deseaba.
“Mientras la creaba sentía como si estuviera construyendo un edificio, pero que se te está cayendo encima de lo grande que es, tuve esa sensación porque realmente la música, especialmente este tipo de obras, son edificios de cierta forma porque estás construyendo sonoridades sobre sonoridades y la magnitud de esta pieza es gigante, porque se necesita de una orquesta muy grande para ejecutarla”.
Uno de los sueños de Julián es que su pieza sea ejecutada por The Cleveland Orchestra, a la que describe como la mejor de Estados Unidos, con un nivel de excelencia impresionante, con un nivel de sonido muy único, elegante y con respeto a la música como en ningún otro lado.
PREMIOS 2020, UN GRAN LOGRO
La primavera de este 2020 ha estado llena de sorpresas y triunfos para el joven artista ya que la obra “El Onceavo Cielo” obtuvo dos de los premios más importantes a nivel mundial en música clásica.
“Este año tuve la oportunidad de formar parte de varias competencias, dos de ellas las más importantes internacionales para jóvenes compositores de música clásica tuve el honor de ganarlas, es muy difícil obtener el premio y lo logré”, recordó con gran alegría.
La pieza fue premiada en la edición 68th del The Annual BMI Composer Award y The ASCAP
Morton Gould Young Composer Award 2020, gracias a su exquisitez, elegancia y ritmo.
“Es muy díficil ganar ambas en el mismo año, sucedió algo así en el 2015, en la BMI tú envías la pieza de manera anónima y se evalúa solo la partitura, es decir, los jueces no escuchan la grabación, contrario a la ASCAP Morton Gould en donde no es anónimo y se evalúa partitura y grabación, es muy difícil que un compositor gane ambas”, mencionó.
CONTINÚA EL CRECIMIENTO
Mencionó que la música clásica contemporánea necesita ser escuchada, que el público conozca y aproveche todas las oportunidades que se tienen en la industria de la música, ya que en su perspectiva hay una necesidad de conocer música que te lleve a vivir otro tipo de sensaciones.
“La música clásica contemporánea habla del hoy, de las necesidades que tenemos que atender como sociedad, país, como mundo, por los deseos que tenemos, por todo lo que queremos hacer y es importante consumirla, vivirla y aprenderla”, comentó.
Julián comparte que la oportunidad de ingresar a la Yale School of Music es algo que siempre quiso y ver que en el mes de septiempre podrá iniciar su maestría, le permite presentarse como una persona con ideas más concretas.
Uno de sus proyectos es trabajar con algún libretista, tenores, sopranos, cinematógrafos, que le permitan combinar sus habilidades con nuevos talentos.
Para finalizar comentó que es muy importante mantenerte obediente a tus deseos, a tus sueños, ya que es muy importante hacerle caso a la intuición y siempre confiar. “Siempre seguir lo que te motiva, si lo sigues con todo tu esmero, si trabajas en eso que deseas dedicándole un pedacito de tu día todos los días no hay forma de que no consigas buenos resultados, definitivamente hacer lo que quieres te abrirá puertas que nunca imaginaste que ibas a conocer”, finalizó.
JULIÁN FUEYO
COMPOSITOR
A mis primeras piezas no les ponía nombre, eran pedazos de música que se iban desarrollando”