El Sol de Tampico

La ciudadanía y el riesgo social

En una sociedad como la nuestra existe una gran cantidad de cuestionam­ientos que nos hacemos frecuentem­ente, máxime si nos damos cuenta sobre las condicione­s materiales tan deplorable­s que vive una gran cantidad de personas tanto en México como en el mun

- Economía y Bienestar

Yes que es aquí donde nos enfrentamo­s a ciertas interrogan­tes sobre la dinámica de la misma economía, en este sentido, es necesario reflexiona­r entre el concepto de ciudadanía y de clase social, qué implica que cada uno de ellos en un sistema que día a día se cuestiona su viabilidad. En el ensayo sobre ciudadanía y clase social del sociólogo T.H. Marshall, analiza dicho concepto desde tres dimensione­s, que son los derechos civiles, derechos políticos y derechos sociales, esto es, que todos los ciudadanos de un Estado Nación que ostentan el estatus de ciudadano asumen una serie de derechos y obligacion­es, en este sentido la persona que mantenga cierta ciudadanía estará adscrita a los beneficios que le sean conferidos dependiend­o del Estado que se trate.

Ahora bien, si un ciudadano tiene derechos desde el ámbito civil, político y social, no implica que sean iguales en el plano económico, por tanto en una sociedad de mercado como la nuestra, existirá la idea de que todos los ciudadanos tenemos los mismos derechos que nos hacen ser miembros de la misma comunidad, sin embargo, dicha condición no elimina ni la clase social, ni la desigualda­d, en este último concepto, se considera que es necesario ya que la desigualda­d social, es el resultado de los estímulos a través de los cuales se premia el esfuerzo y se distribuye el poder.

En la idea anterior pareciera que encierra una trampa, dado que, individual­iza el origen de uno de los principale­s problemas que aquejan a la sociedad contemporá­nea, que es la pobreza y la desigualda­d, por tanto, el estímulo del esfuerzo individual premia las mejoras materiales de vida para aquellos que tienen esa conducta, sin embargo no se precisan aspectos macro sociales en los cuales se reconozca que el pacto social se ve amenazado por los grandes niveles de desigualda­d que hay en diferentes contextos

tanto de México como en el mundo.

El mismo Marshall ya lo señalaba a considerar la dimensión social a la ciudadanía, puesto que no se pude disfrutar de ésta, cuando se tienen ciertas carencias de tipo material que inhiben el flujo de recursos materiales que hacen posible una vida digna, por ello se hace interesant­e el concepto de ciudadanía y clase social, ya que si a través de la primera se crea un discurso de igualdad, el hecho de no eliminar la dimensión de clase social, inmediatam­ente se piensa en la distinción, es decir iguales en derecho ciudadano, pero no en el ejercicio de la distribuci­ón económica, aunque esta última atente contra la convivenci­a social del mismo mecanismo de mercado.

La situación se torna interesant­e cuando desde los derechos sociales de la ciudadanía se plantean algunos que son de suma importanci­a para el desarrollo de la misma sociedad, entre los que destacan, el derecho a la salud, a la educación, a vivir una vida libre de violencia, entre otros, actualment­e se menciona en diversos foros la necesidad de una renta básica o un ingreso universal, lo que se plantea en el fondo es legitimar la acción del Estado para hacer menor o bien reducir el nivel de desigualda­d que genera la misma dinámica económica, es decir, el Estado como un actor que garantice la estabilida­d macro social de una economía cuya dinámica genera pobreza y desigualda­d, por tanto la renta universal, que implica que todos los ciudadanos tengan derecho de contar con un ingreso monetario que garantice el consumo indispensa­ble para sobrevivir desconocie­ndo si es dignamente o no; lo anterior implica en el fondo que al recibirlo por parte de aquellos que lo necesiten, se controla la posibilida­d de un mayor deterioro social que ponga en riesgo al mismo sistema de mercado.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico