La izquierda de Petro conquista a Colombia
Mandatarios de la tendencia ideológica como México, Chile y Argentina felicitan al ganador; prevén difícil futuro en el poder legislativo
AFP, Reuters y EFE
BOGOTÁ. El exguerrillero Gustavo Petro, quien promete ambiciosos cambios sociales y económicos, ganó el domingo la presidencia de Colombia, convirtiéndose en el primer izquierdista en llegar al primer cargo de elección popular en un país históricamente conservador y gobernado por líderes de derecha y centroderecha.
El candidato del izquierdista Pacto Histórico, un economista de 62 años que fue senador, alcalde de Bogotá y perteneció a la desmovilizada guerrilla del M19, obtuvo el 50.4 por ciento de los votos, superando al excéntrico empresario de la construcción
Rodolfo Hernández, quien alcanzó un 47.2 por ciento, con el 99.8 por ciento de las mesas contadas.
Petro propone reformas económicas y sociales para combatir la pobreza, la desigualdad y la exclusión que cautivaron a millones de pobres, aunque despiertan temor entre los empresarios y los mercados financieros.
Casi la mitad de los 50 millones de colombianos viven en condiciones de pobreza, según estadísticas oficiales, por lo que Petro prometió lanzar una campaña para combatir el hambre, el desempleo y mejorar los sistemas públicos de educación y salud, además de entregar un subsidio a los ancianos sin pensión.
“Por fin, gracias Dios mío. Yo sé que va a ser un buen presidente y nos va a ayudar a los menos favorecidos, esto va a cambiar para bien”, dijo Alejandro Forero, un discapacitado y desempleado de 40 años, mientras lloraba en su silla de ruedas en un coliseo de Bogotá en donde se reunieron los seguidores de Petro.
El presidente electo se comprometió también en campaña a iniciar una negociación de paz con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), a imple
Miles de
G. PETRO PRESIDENTE ELECTO “Que el pueblo festeje la primera victoria popular. Que tantos sufrimientos se amortigüen en la alegría que hoy inunda el corazón de la Patria”
simpatizantes del senador Gustavo Petro siguieron la jornada electoral desde las calles
mentar el acuerdo de paz de 2016 con la desmovilizada guerrilla de las FARC, incluidas las disidencias que regresaron a la lucha armada, y a buscar el sometimiento de las bandas criminales implicadas en el narcotráfico. El país aún está inmerso en un conflicto armado de casi 60 años que ha dejado 260 mil muertos, pese al acuerdo de paz que permitió que 13 mil integrantes de las FARC dejaran las armas, se reintegrarán a la vida civil y formarán un partido político.
No obstante, Petro deberá buscar alianzas en el Congreso para impulsar las reformas económicas y sociales con las que se comprometió, debido a que no cuenta con una mayoría pese la buena votación que logró la izquierda en los comicios legislativos de marzo.
Petro anunció en la campaña que no firmará nuevos contratos de exploración para buscar petróleo y carbón, al tiempo que se comprometió a subir los impuestos a los más ricos y a entregar tierras a los pobres para impulsar la producción agrícola, despertando temor entre inversionistas y empresarios.
“Petro no tendrá mayoría en el Congreso, ya que las dos cámaras legislativas están fragmentadas. Por ello, es improbable que se aprueben reformas radicales en los próximos cuatro años”, dijo la analista Daniela Cuéllar de FTI Consulting.
La elección de Petro, luego de dos intentos fallidos, suma a Colombia a otros países de América Latina, como Chile, México y Perú en los que gobiernan líderes de izquierda.
Hernández aceptó su derrota, al tiempo que pidió al presidente electo combatir la corrupción y no defraudar a quienes votaron por él.
“Sinceramente espero que esta decisión que han tomado sea beneficiosa para todos y que Colombia se encamine hacia el cambio que predominó en el voto de la primera vuelta”, dijo el empresario.