El comercio internacional y países “BRICS”
Desde hace ya varios años en materia económica internacional se habla de los países emergentes, estos juegan un papel importante en el desarrollo no solo de sus propias economías, sino que de acuerdo a la posición que guardan respecto a la economía internacional, pueden generar regiones de suma importancia en la geopolítica como en al campo de la reconfiguración de las relaciones internacionales, es decir, se convierten en poco tiempo, en el foco de las nuevas estrategias de desarrollo global en relación a la conexión con las áreas de oportunidad que tienen tanto como fuente de suministro de materias primas como por actividades que emergen siendo importantes en el plano del consumo internacional.
Así ocurrió con los denominados tigres asiáticos en los años 80 (Hong Kong, Corea del Sur, Taiwán y Singapur) quienes de acuerdo a su posicionamiento geográfico- estratégico fueron
objeto de una rápida industrialización que en la actualidad ocupan un papel destacado en el comercio internacional.
En este sentido, una de las alianzas más importantes que en fechas recientes está generando mucha expectativa ha sido el papel que está jugando el grupo denominado BRICS que por sus siglas se refiere a la integración de los países Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica. Dicho grupo de países ha dado a conocer sus intenciones de interacción desde el año 2009 a fin de formar una alianza que de acuerdo a sus condiciones e intereses puedan generar una estructura económica que les permita tener un mejor posicionamiento en el contexto internacional.
De llevar a cabo una mayor interacción entre los países miembros del grupo que conforman el BRICS, quienes concentran el 40 por ciento de la población mundial y contribuyen con más del 20 por ciento del Producto Interno Bruto mundial, así como su participación con más de un tercio de la producción de cereales en el mundo de acuerdo con información de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Por otro lado, las diversas reuniones multilaterales que han llevado a cabo los países miembros, les ha permitido ir más a fondo en el proceso de integración, al grado de verse hoy como una alternativa diferente al modelo de desarrollo implementado por el Fondo Monetario Internacional, así como por el Banco Mundial en materia de financiamiento para el desarrollo, debido a que este año 2023 se fundó el Banco de Desarrollo de los BRICS, lo que abre un área de opciones diferentes a las presentadas por el
FMI-BM para el financiamiento del desarrollo.
Lo anterior genera una expectativa importante, dado que en el plano de las finanzas internacionales se puede estar generando el origen de un nuevo sistema monetario para el intercambio en el mercado mundial, lo cual llevaría a una nueva polarización del comercio internacional, así como a las relaciones multilaterales. Por su parte, en el caso de México, ha sido muy claro el posicionamiento del actual gobierno federal de la importante unión de América Latina, buscando los principios de la complementariedad, lo que sin duda puede contribuir en el fortalecimiento de la cooperación económica regional, que le permita hacer frente a un posicionamiento respecto a los organismos internacionales que tradicionalmente han jugado un papel en el financiamiento para el desarrollo, por otra parte, es importante no perder de vista el ámbito del patrón monetario internacional, que desde la conformación de los Acuerdos de Bretton Woods, en 1944, en el que se estableció el patrón dólar para el intercambio internacional, éste llegó a presentar alguna modificación, debido a que se empieza a vislumbrar una nueva orientación en el campo de las relaciones comerciales internacionales con todas sus implicaciones en el patrón monetario, será que empecemos a ver el declive del dólar en el comercio internacional.
Regeneracion 19