Arrancan precampañas
• Samuel dispersará el voto • Oseguera ¿a una senaduría?
Ayer arrancaron las precampañas de quienes
aspiran a la presidencia de la república, que durarán 60 días y que seguramente reflejarán la orientación de las preferencias electorales, que aunque no serán necesariamente definitivas en un proceso al que todavía le falta una etapa final, las campañas oficiales, sí podrían marcar tendencias muy claras sobre el criterio de los votantes.
Dos mujeres, CLAUDIA SHEIMBAUM, de MORENA, Partido del Trabajo y Verde Ecologista y XOCHITL GALVEZ, propuesta del PAN, PRI y PRD, así como SAMUEL GARCIA, de Movimiento Ciudadano, recorrerán el territorio nacional exponiendo sus idearios, que no planes de gobierno por estar prohibido en este lapso, con el propósito de concitar simpatías y apoyos.
Será una guerra sin cuartel en la que las y el participante intentarán aprovechar el menor error de sus contrapartes para efectos de demolición por un lado y el avance propio por el otro. Durante dos meses, los mexicanos seremos bombardeados por miles de spots en las redes sociales y de noticias relacionadas en la mayoría de los medios de comunicación convencionales.
En principio, se consideraba que la batalla se daría entre dos fuerzas principales: el Frente Amplio por México, con XOCHITL y el Movimiento de Regeneración Nacional con CLAUDIA. Pero la aparición en último momento de SAMUEL GARCIA como abanderado de Movimiento Ciudadano, que se negó a sumarse al prianismo decidiendo competir con candidato propio, insertó una tercera opción que rompe con el choque entre solo dos polos.
Esto puede muy probablemente causar la atomización del voto alterando los porcentajes que se calculaban en la hipótesis de que solo hubiera dos candidatas. Y ello hace más interesante el proceso de sucesión presidencial en nuestro país.
Vale recordar que en los comicios del 2018 también hubo tres candidatos, JOSE ANTONIO MEADE, del PRI, RICARDO ANAYA del PAN y ANDRES MANUEL LOPEZ OBRADOR de MORENA. En ese entonces, el antes invencible tricolor fue refundido al tercer lugar, por debajo del blanquiazul y el partido guinda superó a ambos por una enorme diferencia.
Pero hoy, PRI y PAN van juntos, remolcando a un moribundo PRD, en busca de que esta alianza sume los sufragios necesarios para echar de palacio nacional a la cuarta transformación. Pero habría que echarle un vistazo a los números históricos para saber que tan viable resulta ese proyecto.
En el 2018, el candidato de Acción Nacional obtuvo 12 millones de votos y el del Revolucionario Institucional 9 millones, que sumados arrojan la cifra de 21 millones, lo que se traduce en un 32 por ciento de la votación general. Pero MORENA se llevó 30 millones de sufragios, equivalente al 53 por ciento superando los números totales de los dos primeros.
En un ejercicio virtual, El Frente Amplio por México deberá partir de esa numeralia para tratar de manera conjunta aumentar las cifras de votación para revertir aquella ventaja que les sacó el lopezobradorismo y llegar en principio a un empate técnico que les acercaría al triunfo con muchas posibilidades de lograrlo. Esa parece ser la estrategia concebida por la oposición prianista=perredista: aglutinar a todos los sectores adversos a ANDRES MANUEL LOPEZ OBRADOR y a quienes pudieran estar desencantados con su gobierno.
Pero la irrupción del joven gobernador de Nuevo León con licencia podría modificar la proporción y atraer a un importante universo de los inconformes con el actual estado de cosas. Un rostro joven, con personalidad entrona y con mucha facilidad discursiva, incluso improvisada y con un formidable manejo de las redes sociales junto con su esposa, una conocida “influencer”, puede resultar un imán para muchos electores, tal como sucedió para su triunfo en el estado neolonés, que muchos consideraban imposible.
Esto le partiría el voto a los frentistas tomando en cuenta además algunas otras consideraciones. En la mayoría de las encuestas, el PRI, después de la desastrosa administración de ENRIQUE PEÑA NIETO, aparece como el partido por el que nunca votarían muchos ciudadanos. El PAN arrastra con el antecedente de haber gobernado México durante dos sexenios con un saldo negativo, pues tanto VICENTE FOX como FELIPE CALDERON no tienen buen puntaje en la memoria social.
Esta eventual dispersión de votos hacia la nueva opción minaría el punto de partida del Frente Amplio de los más de 20 millones de sufragios, alejándolo de sus proyecciones iniciales cuando contemplaban la lucha solo entre dos. Y aunque también podría escamotearle votos a MORENA, la abismal distancia registrada en 2018 y confirmada en las últimas elecciones estatales, podría no alcanzarle a SAMUEL para llegar a la jefatura de la Nación, aunque le habría dado un formidable jalón a Movimiento Ciudadano que podría convertirse en la segunda fuerza política en el país.
Así de interesante luce el panorama político nacional al arrancar las pre=campañas, que en los hechos serán auténticas campañas que solo se prolongarán por otros meses el año próximo bajo otra regulación. Habrá que estar pendientes.
Pasando a temas locales, trascendió que ADRIAN OSEGUERA KERNION, se registró como aspirante a una senaduría por MORENA. El alcalde de Ciudad Madero es uno de los activos más importantes del partido guinda en Tamaulipas, por el excelente trabajo que ha hecho a lo largo de cinco años de gobierno municipal y por su trayectoria en favor de la cuarta transformación que en los hechos ha honrado sobradamente.