DE ACUERDO CON LOS ESPECIALISTAS UNA DE LAS RAZONES POR LAS QUE MÁS OCURREN LOS HOY EN DÍA ES LA QUEMA NO CONTROLADA, QUE EN SU MAYORÍA, ES REALIZADA POR AGRICUL
Los cuerpos policiales de Chile adelantan 50 investigaciones sobre la intensa ola de incendios forestales que ha golpeado recientemente la zona centro sur del país para determinar si hubo intencionalidad en la generación de los siniestros, dijo el martes el subsecretario de Interior, Manuel Monsalve, de acuerdo don la agencia de noticias Reuters.
"Más de 432 mil hectáreas se han quemado durante la temporada actual, que además ha dejado 24 personas fallecidas, mil 513 viviendas destruidas y más de seis mil 800 damnificados".
Después de la ola de incendios en Chile, otra vez los incendios forestales tomaron relevancia en las agendas mundiales. Mucho se habla de cuántas hectáreas se llevan o a cuáles comunidades afectan, pero se le presta poca atención a las consecuencias que el medioambiente sufre a causa de estos fenómenos.
Para comprender el riesgo que suponen los incendios forestales es necesario entender las razones por las que suceden.
Si bien sus causas van desde la caída de rayos o el aumento de la temperatura en la zona, el 90 por ciento son provocados por el hombre, de acuerdo con datos de la Comisión Nacional Forestal, Conafor.
Las condiciones climáticas actuales como el aumento de la temperatura en el planeta, la velocidad y dirección del viento, así como el nivel de humedad en el suelo y la atmósfera, provocan que la mitigación de incendios forestales sea cada vez más difícil.
“La mayoría de los incendios son provocados por el hombre bajo demandas sociales y quienes los provocan buscan ejercer presión en sectores empresariales o gubernamentales”, explicó a Fidel Camacho, especialista en manejo de recursos naturales.
Estos fenómenos pueden ocurrir bajo cuatro contextos: accidentales (relacionados con percances automovilísticos, ferroviarios o con la ruptura de líneas eléctricas), negligencias (quemas no controladas o descuido de personas que visitan las zonas), intencionales (se dan bajo un conflicto de intereses) y naturales (caída de rayos o erupciones volcánicas).
De acuerdo con los especialistas una de las razones por las que más ocurren los incendios forestales hoy en día es la quema no controlada, que en su mayoría, es realizada por agricultores y ganaderos. “La gente ganadera tiene la creencia de que si quemas una extensión de tierra, para el próximo periodo va a rebrotar, pero esto solo es una creencia, porque no todos los suelos y plantas tienen la capacidad de recuperarse después de un incendio”, cuenta a este medio Alberto Almeraya, coordinador de reforestaciones en Naturalia.
Una de las razones más comunes por la que el sector ganadero y agrícola provoca incendios forestales es para hacer cambio de uso de suelo, el cual por sí solo representa daños para el medioambiente. “Una de las prácticas de quema que se han llevado a cabo durante muchos años en México es roza, tumba y quema, la cual consiste en quemar grandes extensiones de tierra para lograr abrir paso en las áreas naturales para los cultivos. Sin embargo, cada vez es menos recurrente”, explicó Camacho.
Los incendios forestales generan grandes toneladas de carbono negro, uno de los contaminantes más dañinos para el medio ambiente, después del dióxido de carbono.
Además, contribuyen al derretimiento de los glaciares ya que son fenómenos que en gran medida contribuyen al calentamiento global.
Según señala la Organización de las Naciones Unidas, ONU, en su último Informe de Fronteras, la mayor consecuencia que tienen los incendios forestales en términos ecológicos es que las áreas que antes funcionaban como sumideros de carbono, se convierten en grandes fuentes de este compuesto.
Bajo este contexto, la principal afectación que las áreas naturales sufren después de un incendio forestal es la quema de su “piel”, es decir, su suelo y sus especies.
“La cuestión es que al quemar no sólo te estás llevando la madera de los árboles incendios forestales son provocados por el ser humano o las plantas, sino también todo el material orgánico que forma parte del suelo o también llamado hojarasca. Este, cambia su PH cuando se convierte en ceniza y lo que provoca es que comience a romper la cadena de funcionamiento del ecosistema entero, ahí es donde comienza el problema”, alertó Camacho.
Aunado a ello, viene la erosión de los suelos, un proceso en el que pierde su capa superficial y sin ella, se convierte en una superficie inerte.
“Al tener un suelo erosionado, este pierde su capacidad de esponja de agua. Esto provoca que el agua pluvial ya no se absorba para nutrir los mantos freáticos y en su lugar, solo se va al drenaje, lo que se traduce en un desperdicio inmenso de este recurso”, añadió Camacho.
Hay que recordar que la mayor fuente de agua para consumo humano son los mantos freáticos o acuíferos, los cuales a falta de áreas naturales, no pueden recargarse y por ende, escasea el agua.
Sin embargo, el problema provocado por la falta de absorción del agua no se queda ahí y los especialistas nos cuenta porqué:
“Para el momento en que llegan las fuertes lluvias, viene la erosión hídrica, la cual provoca deslaves y es ahí donde vienen los problemas de inundación, taponeos de drenaje y con ello pérdidas de infraestructura, materiales e incluso de vidas”, puntualizó Almeraya.
Tanto la flora como la fauna de los ecosistemas, son las principales víctimas de los incendios forestales, las cuales pueden sufrir de problemas que van desde su des