HA SUFRIDO EL ARGENTINO EN SUS NUEVE DUELOS ANTE LOS BÁVAROS
la figura del portero Gianluigi Donnarumma, quien evitó una humillación mayor.
Los Bávaros sobrevivieron a la reacción del París Saint Germain y lograron llevarse del Parque de los Príncipes una victoria que los deja en buena situación para avanzar a los cuartos de final de la Champions League por décima vez en los 11 últimos años.
Bayern Múnich salió con más ganas de llevarse el duelo, instaló la presión alta y se mudó al área del conjunto local, en la que transcurrió la mayor parte del primer tiempo, con Messi y Neymar desconectados del juego, lejos de la zona de peligro.
Con el tiempo cumplido para el descanso, Messi dispuso de un tiro libre a 30 metros del arco defendido por Yann Sommer, pero su cobro se estrelló en la barrera.
Bayern se marchó al vestuario con nueve tiros a su favor y sólo uno en contra, el peor primer tiempo ofensivo del club francés en la Champions League desde 2016.
Alphonso Davies, quien sustituyó a Joao Cancelo durante el descanso, envió el balón al segundo poste para que Coman rematara, con la parte interior del pie, aunque con la complicidad de Donnarumma, y pudiera abriera el marcador.
El francés, formado las fuerzas básicas del París Saint Germain, el mismo que anotó el gol de la victoria en la final de 2020 entre ambos clubes, no celebró el gol que hacía justicia a lo que se había visto en la cancha.
Milán, Italia.- El Milan reapareció de la mejor manera posible en los octavos de final de la Champions League, tras derrotar 1-0 al Tottenham, gracias al gol de Brahim Díaz, en un encuentro en el que volvió a sentirse importante en un gran escenario, en el que recuperó la esencia que la temporada pasada lo llevó al título de la Liga italiana, así como la confianza perdida en los últimos meses.
El estadio San Siro recibió el partido como el más grande de la temporada. Y es que la afición escuchó el himno de la Champions League en los octavos de final nueve años después de la última vez.
La espera había sido demasiado larga como para no vivirla con esa intensidad que también pusieron en la cancha los jugadores de ambos equipos.
El encuentro comenzó con el nerviosismo habitual y propio de la eliminatoria. Faltas, interrupciones, duelos físicos y pequeñas imprecisiones que hicieron que ninguno se impusiera claramente sobre el otro, aunque el tanto de Brahim, con sólo siete minutos de juego, condicionó las acciones y desató la locura por parte de la afición local.
Theo Hernández atacó el espacio y se midió en un duelo aéreo con Cristian Romero, en las inmediaciones del área. Con mayor fuerza, determinación y convicción que el defensor, se quedó con la posesión y encaró al arco y tiró, pero el Fraser Forster atajó con el pecho y dejó rechace en el punto de penalti, donde apareció Brahim para, en dos tiempos y tras una espectacular mano del portero, rematar con la cabeza y placer para así abrir el marcador.
El técnico Stefano Pioli celebró en grande, consciente de que el gol lo acercaba al partido que a él le interesaba, liberándose así de la tensión acumulada tras una etapa de crisis en la que sumó siete partidos consecutivos sin conocer la victoria.
No salieron a especular ni Pioli ni Antonio Conte en el duelo de técnicos italianos, pero el del Milan se valió del tanto para ceder un poco la posesión del balón al club inglés, que intentó, sin éxito, conectar con Son Heung
AÑOS LLEVABAN LOS ROSSONERI SIN DISPUTAR LOS OCTAVOS DE FINAL
Min y Harry Kane en zona de tres cuartos.
Perdonó el Milan y le tocó sufrir frente a un Tottenham venido a menos en su regreso a octavos de final de la Champions League.
El Milan volvió a lo grande. /