El Sol de Tijuana

“Fue un camino muy l

- FILIBERTO RAMOS EMIRETH COSSIO / El Sol de Cuernavaca

/El Sol de Toluca

TOLUCA. Al Registro Civil, ahora pueden llegar solas, sin testigos, o un amparo, explican Sandra y Yesenia. Ellas se presentaro­n y con su hijo en brazos, unos 15 minutos antes del horario que les solicitó el juez.

Acudieron al Registro Civil de Toluca un jueves a las 14:45 horas, porque se casaban esa tarde del 19 de enero de 2023. Fue una recepción fortuita. Por mucho 20 minutos. Es lo que demoró el juez para otorgarles legalmente su acta de matrimonio.

“Fue muy rápido y el juez muy amable”, explica Sandra Bermúdez González y pareciera que lo dice como lo más cotidiano que pudo pasar. Pero ella y Yesenia saben que, para celebrar un matrimonio entre dos mujeres, en el estado de México las parejas debieron esperar más de 15 años.

Sandra y Yesenia se conocieron hace ocho años pero hace cinco se hicieron pareja. Luego decidieron ser mamás y se sometieron a un proceso médico en el que a ambas les extrajeron óvulos para tener a su hijo a quien hoy llevaron en brazos.

“Las dos somos su mamá, las dos tenemos la misma responsabi­lidad y cuando debemos ir a la escuela va una y a veces otra”, explicaron.

Aún así, han lidiado con la discrimina­ción y con el rechazo. También con los trámites burocrátic­os que no les permitían acceder a todos los derechos que son obligados para el resto.

Fue entonces que hallaron más trabas para vivir en pareja y atender a su pequeño. Las Leyes no respaldaba­n del todo la atención médica y otros trámites legales.

Pensaron en solicitar un amparo y casarse por esa vía, pero no fue posible. “De hecho era el plan, irnos a casar a la Ciudad de México, pero decidimos esperarnos a que aprobaran aquí la ley”, explicó Yesenia Ávila Pagaza.

Una vez que el Registro Civil les otorgó su acta de matrimonio, todo se aligera, dice Yesenia, porque ahora pueden solicitar el pasaporte y viajar con su hijo, como fue su plan hace años. También actualizar su seguro médico.

“Ahora es más sencillo, y primero que nada el pasaporte de Demian, porque pensamos viajar y salir del país”, expuso la pareja que uno de sus planes es viajar en próximas fechas.

Antes de la pareja de Sandra y Yesenia, otras dos mujeres en Coacalco consumaron su matrimonio. Leticia y María del Rosario, se convertirí­an en la primera boda lésbica en el estado de México.

CUERNAVACA. Tania Nava es una de las activistas pro derechos de la comunidad LGBTI+ más influyente­s en el estado de Morelos; su perseveran­cia y amor por Mónica Parra la motivó a ser una de las precursora­s de la lucha.

En 2016, el matrimonio igualitari­o fue aprobado por el Congreso del estado de Morelos, con esta “conquista”, Mony y Tania unieron sus vidas de manera legal, siendo una de las primeras parejas pertenecie­ntes a la comunidad LGBTI+ que tuvo una boda civil en la capital morelense.

Los impediment­os para lograr la boda fueron muchos, principalm­ente por la discrimina­ción, que a pesar de que por ley ya podían unir sus vidas, el contexto religioso dentro de las políticas públicas lo polarizaro­n, es decir, jueces y juezas se regían bajo posturas religiosas lo que ocasionó constantes negativas.

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DANIEL CAMACHO/EL SOL DE TOLUCA

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