Acusada de tortura, al mando de la CIA CONFIRMAN A GINA HASPEL
Será la primera mujer al mando de la agencia de espionaje estadounidense
“El nombramiento es una desgracia para la democracia” CHRISTOPHER ANDERS SUBDIRECTOR DE LA UCLA
WASHINGTON, DC. El Senado de Estados Unidos confirmó el nombramiento de Gina Haspel como nueva directora de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), a pesar de la enorme controversia por su papel en la aplicación de torturas en la llamada “guerra al terror”.
Haspel, de 61 años y especialista en Rusia, se convierte así en la primera mujer a conducir la CIA. La funcionaria ocupaba interinamente el cargo desde que el anterior director, Mike Pompeo, asumió como Secretario de Estado.
Ayer, el nombramiento de Haspel resultó aprobado por 54 votos a favor, 45 en contra y un voto ausente. Seis legisladores del opositor partido Demócrata votaron en favor de la funcionaria.
Haspel había obtenido el voto favorable a su nombramiento en el Comité de Inteligencia del Senado, donde en marzo protagonizó una audiencia pública altamente controvertida, durante la cual se negó a condenar el uso de técnicas de tortura a ciudadanos extranjeros bajo sospecha de ser “combatientes” contra Estados Unidos en el marco de la “guerra al terror”.
Después de la confirmación, la senadora demócrata Elizabeth Warren afirmó que Haspel no era confiable.
“Patriotismo y sentido común no son la misma cosa. Y una persona que coloca la protección de la agencia (CIA) por encima de la protección de la ley, no puede ser confiable”, señaló.
Por su parte, Christopher Anders, subdirector de la influyente Unión de las Libertades Civiles (UCLA, en inglés), apuntó que la confirmación de Haspel era una “desgracia para la democracia”.
“Por primera vez en la historia de Estados Unidos la CIA será conducida por alguien con un pasado en el uso de la tortura”, señaló.
De acuerdo con The Washington Post, por lo menos dos exdirectores de la CIA -John Brennan y Leon Panetta- ayudaron a conseguir los votos necesarios en el Senado para la confirmación de Haspel.
De acuerdo con versiones coincidentes, en meses recientes Haspel se había convertido en una voz influyente sobre el presidente Donald Trump, en particular en la postura de la Casa Blanca con rela- ción a Rusia.
En marzo, EU expulsó a nada menos que 60 diplomáticos rusos de su territorio, a quienes acusó de espionaje, y ordenó el cierre del consulado ruso en Seattle.