LO MAS Y LO MENOS
CON 4 MEDALLAS DE BRONCE, LA DELEGACIÓN MEXICANA SE QUEDÓ CORTA DE LOS PRONÓSTICOS DEL COM Y LA CONADE
Previo al inicio de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, México había obtenido 69 medallas olímpicas a razón de 13 de oro, 24 de plata y 32 de bronce, durante las 23 ediciones de Juegos Olímpicos en que ha participado, de las 31 que se han realizado, con las suspendidas durante la Primera y la Segunda Guerras Mundiales.
En la edición de Tokio, los atletas mexicanos únicamente consiguieron ganar cuatro preseas de bronce. El frío conteo final dejó el resultado para nuestro país en: 73 preseas: divididas en 13 de oro, 24 de plata y 36 de bronce. Con ello, la delegación mexicana ocupó el decepsionante lugar 83 del medallero.
Si bien numéricamente esta no ha sido la peor participación, pues hubo ediciones como las de París 1924 y Ámsterdam 1928, en que nuestros deportistas regresaron con las manos vacías, el número de atletas fue mucho menor; a razón de 15 en París y 30 en Ámsterdam; contra los 164 que tomaron parte en Tokio 2020, donde conquistaron sólo cuatro preseas de bronce.
Antes de viajar a Japón, la titular de CONADE, Ana Gabriel Guevara, consideró que la numerosa delegación que esta vez acudió a la máxima justa deportiva mundial de verano tenía posibilidades de obtener 10 preseas; mientras que el presidente del Comité Olímpico Mexicano, Carlos Padilla, fue más realista y estimó que podrían ser cinco, al igual que las que se obtuvieron en Río 2016. Carlos Padilla Becerra le apostó al equipo de fútbol, al de softbol, a los representantes de golf y dijo que
un par de clavadistas.
CUARTOS LUGARES, NADA DESPRECIABLES
Nada emociona más que ver a un deportista en el podio, y aunque la cantidad de medallas obtenidas es el indicador para medir el desempeño de una delegación, es importante reconocer que los resultados son tangibles más allá de las preseas. El caso de México no es la excepción, en la edición de Tokio 2020 la afición se quedó con ganas de escuchar el Himno Nacional y de celebrar algo más que los cuatro bronces que llegaron de la mano
de Alejandra Valencia, Luis Álvarez, Alejandra Orozco, Gabriela Agúndez, Aremi Fuentes y el Tri; sin embargo, los siete cuartos lugares que se consiguieron no son nada despreciables, aunque queda el sentimiento de que se pudo hacer algo más que sólo estar cerca de la gloria olimpica.
La delegación mexicana ocupó el lugar 83 del medallero, apenas por encima de ocho naciones, sin embargo, concluyó su participación en Tokio 2020 con 21 reconocimientos; cuatro medallas y 17 diplomas olímpicos, de los cuales siete se quedaron solo a un paso de la presea de bronce, tres fueron por quinto lugar, seis por el sexto y uno más por un octavo, que también tiene su mérito.
Dejando de lado la actuación en México 68, el mejor registro en cuanto a medallas es el de Londres 2012, donde se consiguieron ocho preseas y 14 diplomas para un total de 22 reconocimientos, sólo uno más que lo hecho en Tokio 2020.
En Los Ángeles 84 y Sidney 2000 se ganaron 6 medallas, pero con la diferencia de que en la primera edición cayeron dos oros, mientras que en Sidney nadie subió a lo más alto del podio. En cuanto a diplomas en ambas ocasiones se consiguieron ocho, por lo que en las dos suman 14 reconocimientos.
Tras esas ediciones viene Río 2016, donde la cuota fue de cinco metales y 15 diplomas para un total de 20 reconocimientos.
Tras lo anterior resulta complicado concluir que la actuación en Tokio 2020 fue desastrosa, pues el registro en reconocimientos rebasa a Río y se queda solo a un escalón de Londres, además, la mayoría de los cuartos lugares obtenidos llegaron acompañados de jóvenes promesas que seguramente mejorarán su rendimiento en París 2024.