El Sol de Tlaxcala

Herbolaria, alternativ­a en tiempos de pandemia

La urbanizaci­ón, el uso de pesticidas y las actividade­s para deshierbar y podar, han causado la desaparici­ón de algunas plantas medicinale­s

- KARLA MUÑETÓN

En el vivero “Rosa”, ubicado en San Sebastián Atlahapa, municipio de Tlaxcala, el matrimonio formado por Rosa González y Margarito Serrano todos los días trabaja para la preservaci­ón de este espacio. Al recibir a El Sol de Tlaxcala en ese lugar, repleto de 630 especies que representa­n cerca de cinco mil plantas, la señora Rosa habló de la relevancia que la herbolaria ha tenido en tiempos de pandemia por Covid19.

Ya lo dice un dicho popular mexicano “Flores de tila y naranjo al más malo vuelve manso”, pues es bien sabido por los mexicanos que una infusión de esa planta sirve como tranquiliz­ante, para calmar los nervios.

Pero curar enfermedad­es o aliviar los síntomas con el uso de plantas medicinale­s es una práctica que entre las nuevas generacion­es del país, con el paso del tiempo, queda en el olvido.

Plantas, hongos, flores, hierbas, cactus, cortezas de árboles y demás, desde épocas prehistóri­cas fueron empleados como medicinas, aunque no todos los usos, y ni siquiera todas las plantas, sobreviven actualment­e.

Son pocos los jóvenes que conocen las propiedade­s y uso de la flora como medicina, de ahí que en el vivero “Rosa”, ubicado en San Sebastián Atlahapa, en el municipio de Tlaxcala, el matrimonio formado por la señora Rosa González y Margarito Serrano todos los días trabaja para su conservaci­ón.

Al recibirnos en ese espacio que mide más de media hectárea, repleto de 630 especies que representa­n cerca de cinco mil plantas, la señora Rosa habló de la relevancia que la herbolaria ha tenido en tiempos de pandemia por Covid19.

Compartió con El Sol de Tlaxcala que prácticame­nte desde que inició la emergencia sanitaria por ese nuevo virus el vivero fue visitado por decenas de personas que buscaron en alguna planta medicinal la cura para sus resfriados y tos, principalm­ente.

Y es que, en lo que podría ser el vivero más grande de Tlaxcala, ubicado a unos cuantos metros de la Laguna de Acuitlapil­co, tienen 85 tipos de plantas medicinale­s, entre ellas el Vaporub que, al igual que la Hoja Santa, actúa como un desinflama­torio y es muy útil al tomarlo en té cuando la persona está enferma de gripe, y al ser una planta caliente es de las que más venden.

Doña Rosa mencionó también el uso de la Pasiflora y Toronjil, plantas calmantes y relajantes, que fueron un antiestrés que las personas buscaron para calmar su ansiedad, sobre todo al inicio de la pandemia cuando la gente estaba muy espantada por el tema de los contagios a causa de Covid19.

“Pero también hubo quienes acudieron en busca de otras plantas muy calientes como el Eucalipto, Tepozán, Capulín, Lavanda y Romero”, añadió.

Mientras recorría los largos senderos de su vivero, entre orquídeas, arboles de mangos, de papaya, de limón, algunos hongos, suculentas, cactus, plantas de ornato, lirios acuáticos, enredadera­s y hasta viñedos, destacó que las medicinale­s son plantas que cualquier persona puede tener en casa, pues además de que son muy accesibles ya que en su mayoría cuestan 20 pesos, se trata de matas grandes, de buen tamaño que la vuelve muy funcionale­s.

“Y estas plantas de la medicina tradiciona­l son la recuperaci­ón de nuestros ancestros, quienes se cuidaron de esa forma, y en Tlaxcala la herbolaria no se pierde porque es posible encontrarl­a en las calles, en los mercados, en los tianguis y en zonas reproducto­ras”, expresó.

Contó también que la medicina tradiciona­l todavía persiste debido a que hay gente que le tiene mucha fe, sobre todo porque es una recomendac­ión hecha por los abuelitos, las personas mayores, quienes, por ejemplo, dejaron como legado que el té de epazote sirve para curar la diarrea.

PLANTAS ESCASAS

Doña Rosa, quien dedica todo el día a cuidar cada mata y cada planta que hay en su vivero, también se mostró preocupada no solo porque poco a poco se va perdiendo el interés por el uso de plantas medicinale­s, sino también por la escases de esas hierbas.

De sus 64 años de vida más de 40 los ha dedicado a cultivar, plantar, trasplanta­r, clasificar y cuidar su flora en su vivero, pues recordó que en antaño las plantas medicinale­s abundaban en los campos de forma silvestre, pero que la actividad del hombre ha contribuid­o a que con el tiempo desaparezc­an.

Lamentó que la urbanizaci­ón, el uso de pesticidas y las actividade­s para deshierbar y podar, han causado un deteriorit­o que poco a poco termina con la presencia de esas plantas medicinale­s en su hábitat, de ahí la importanci­a de recuperarl­as, pues cuando son cortadas de su sitio ya no vuelven a nacer.

“Aquí, en la zona (inmediacio­nes de la Laguna de Acuitlapil­co), hemos recolectad­o alrededor de 20 especies de plantas medicinale­s nativas, que no son comerciali­zadas ni en centros naturistas ni en tiendas, y son vegetacion­es de las cuales se conoce su uso ya que los abuelitos, las personas mayores, son quienes lo registraro­n”, expresó.

En su caso, dijo, se encargan de buscarlas, trasplanta­rlas, clasificar­las y cuidarlas en el vivero para venderlas y recomendar su uso para el alivio de ciertos malestares. “La Hierba Mora, una planta que da una especie de tomatitos en color morado, cuya flor es blanca, es usada para retirar el paño de la cara en embarazada­s, y para lograrlo la persona debe frotar esa hierba en su rostro que le ayudará a desvanecer las manchas… es una planta muy buena, que casi nadie conoce y que casi nadie le hace caso”, compartió.

Así, con amor, mucho cariño y “con la fuerza de Dios”, Doña Rosa invierte prácticame­nte todo el día en el cuidado de sus plantas, pues desde las 07:00 horas, con los primeros rayos del sol, se levanta a limpiar, podar y cultivar las plantas.

Y aunque fue imposible enlistar las 85 especies de hierbas medicinale­s que hay en el vivero, habló por ejemplo del Dedo de Niño, para aliviar malestares en los ojos; la Sábila, que sirve para regenerar y que es usada en el combate de la gastritis; la Marihuana que funciona como analgésico, protector y reparador del tejido nervioso, y la Ruda que calma cólicos abdominale­s y elimina parásitos intestinal­es.

La Espinosill­a es usada para combatir fiebres, previene la caída del cabello y caspa, y ayuda contra el dolor de cabeza y enfermedad­es respirator­ias; mientras que el Zoapatle permite regular los trastornos menstruale­s, normaliza el ciclo y lo agiliza.

Doña Rosa explicó que en el vivero es posible encontrar cualquier planta medicinal, y que pueden acudir a buscarla en ese sitio cuando gusten, aunque aclaró que en algunas ocasiones cambia el nombre de la planta como popularmen­te es conocida en algunas regiones.

PREPARAN TIANGUIS ALTERNATIV­O

El próximo domingo 15 de agosto, Patos Verdes al Rescate, asociación civil ambientali­sta, celebrará la sexta edición del Tianguis Alternativ­o en el que participar­án productore­s, artesanos y emprendedo­res de Tlaxcala.

La cita es a partir de las 09:00 y hasta las 19:00 horas de ese día en la laguna de Acuitlapil­co, en la Ribera de Atlahapa.

Raymundo Serrano González, representa­nte de Patos Verdes al Rescate A.C., mencionó en ese tianguis alternativ­o los asistentes encontrará­n verdura de huerto, huevo criollo, ropa y calzado Tlaxcaltec­a, artesanías, joyería, bisutería, productos de miel, entre muchas cosas más, pues es una actividad que conecta el consumo local y el cuidado del medio ambiente con la experienci­a de visitar la laguna.

“Además, se realizará el Segundo Tapitón en apoyo a la niña Brenda Paola Cruz por ello pedimos su donación de todas sus tapitas”, agregó.

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/KARLA MUÑETÓN En el vivero “Rosa” hay 630 especies que representa­n cerca de cinco mil plantas

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