Historia viva
DE RAYADOS YA SUPERÓ A CHUPETE Y ESPERA ACRECENTAR AÚN MÁS SU FIGURA
Rogelio Funes Mori se convirtió en el máximo goleador de Rayados en su historia, pero el Mellizo no se conforma y anhela mucho más.
El delantero afirmó que llegar a 123 anotaciones con Monterrey no lo deja satisfecho. A partir de ahora comienza su carrera en solitario y espera incrementarlo con varios festejos más, incluso en su mente también está ganar más títulos en la Sultana del Norte.
“Quiero seguir haciendo historia, no me puedo quedar con esto, quiero seguir mejorando, creciendo como futbolista y profesional, como persona y conseguir más títulos”, expresó al término del partido ante los Tuzos, donde llegó a la mágica cifra y superó por fin al chileno Humberto Suazo.
El argentino tardó más de lo esperado. Pasaron 133 días exactamente desde que empató al Chupete con 121. Se fue en blanco en siete partidos consecutivos, entre fase regular y Liguilla, pero en la quinta jornada del Grita México 2021 y el Gigante de Acero como marco perfecto, finalmente lo hizo realidad. “Muy orgulloso, muy contento de lograrlo, se hizo esperar, me costó, pero era el objetivo, lo importante es que ganamos, seguimos sumando”, aseveró.
El estadio BBVA fue testigo del mágico momento. 15 mil 883 espectadores en vivo y muchos miles más por televisión vieron a su ídolo ser alzado por los aires. “A la gente le tengo mucho agradecimiento, ellos estaban más desesperados que yo, me lo hacían saber en el día a día, en la calle, me siento muy agradecido, gracias a esa afición este club es grandísimo”, cerró.
PARA EL VASCO, FUNES SE QUITÓ UN PESO DE ENCIMA
La sequía de Rogelio Funes Mori se acrecentó más de lo esperado. El goleador no pudo marcar en 821 minutos consecutivos, pero en cuanto el silbante Óscar Macías marcó un penalti por falta sobre Joel Campbell, todo cambió. Las miradas se fueron inmediatamente con el Mellizo. El atacante de La Pandilla no decepcionó y venció al portero Óscar Ustari, después llegó uno más. Para su técnico Javier Aguirre, finalmente le llegó su recompensa al esfuerzo. “Venía esperando este momento el pobre Rogelio hace ya muchos partidos, finalmente se le dio".