Valeria Golino regresa a la televisión de EU
Participa en la segunda temporada de The morning show con un personaje escrito pensando en ella
Participó en
películas como
Loca Academia de Policías, Rain man, Living Las Vegas y Frida, en el papel de Lupe Marín
Valeria Golino vivió en Los Ángeles durante diez años, "tal vez 12", duda la actriz italiana. Pero la última vez que estuvo ahí fue hace un año, cuando llegó para filmar los capítulos de la segunda temporada de The morning show, serie de Apple TV+ a la que se unió con el personaje de Paola Lambruschini, una documentalista.
Cuando bajó del avión "la atmósfera era totalmente diferente", recuerda durante una entrevista con El Sol de México.
El Covid estaba en un punto álgido, una segunda ola similar a la que se vive actualmente con el Ómicron.
Su participación en la serie, que ya tenía el prestigio de ser nominada al Emmy, fue muy distinta a la que se imaginó. "Hicimos ensayos en Zoom, nunca conocí a la gente con la que no coincidí en el set. Conocí a Jennifer (Aniston), Billy (Crudup) a todos, pero nunca a Reese Whiterspoon porque nunca nos vimos en los cinco meses de filmación".
La segunda temporada de The morning
show, ambientada en el inicio de la pandemia, sigue la historia de un programa de televisión matutino, que vive una crisis después de que Mitch Kessler, su conductor masculino, interpretado por Steve Carrel es acusado de acoso sexual y se va a refugiar a Italia.
Ahí es donde entra Paula, el personaje que interpreta Golino, que coincide con
Mitch en Italia y le pide ayuda para consolidarse como documentalista. Ambos pasan la cuarentena juntos e inicia un redescubrimiento humano de ambas partes.
Ella describe a Paula como "una niña pequeña, una dama de mediana edad con inocencia y coraje. Es una mujer que está limpia, que no tiene éxito, no persigue la fama, ella no quiere tener una posición en sociedad, no le importa. Está por encima de eso, es marginal pero un poco romántica, todo al mismo tiempo".
Para la italiana, este es uno de los personajes más duros de su carrera por la responsabilidad emocional que implicaba llevarlo a la pantalla, más aún con el contexto histórico del Covid y en suma a que el papel fue escrito por la guionista Kerry Ehrin pensando en ella.
“Desde el principio pensé `¡Dios mio!'. Y cuando lo leí me sentí responsable de alguna forma por ella, porque pensé que esta mujer representa muchas cosas a la misma vez”.