The Batman: la fría venganza
Impecable en su estructura y propuesta de género negro The Batman (Matt Reeves, 2022), tiene su columna vertebral en la novela policíaca y detectivesca pura, clásica.
Con sus códigos muy bien definidos y hasta cierto punto cercano al virtuosismo. Es clara la influencia de autores como Donald Hamilton o Mickey Spillane.
No será la primera vez que un filme del personaje creado por Finger y Kane en 1939, utilice al murciélago para ir más allá de la adaptación comiquera, pero en esta ocasión, todo se nota desde la primera capa.
Sin que esto sea malo, el código de convenciones está al alcance de tal vez no una primera mirada, pero sí de un espectador de cierto vuelo. Eso sí, con una pretensión intelectual, que el mismo tono de género facilita.
Sí, hay una indiscutible llamada para salirse de los personajes basados en los cómics, pero falta en alguno de ellos un punto de evasión, de subjetividad. El problema es que por momentos el filme en su receta, es impecable.
En lo detectivesco y para exponer su código de convenciones veamos la sinopsis: Un justiciero renegado, Batman (Robert Pattinson, con la mandíbula de fuera toda la película, aunque la verdad dicho esto, está bastante bien en el papel) se instala en el arquetipo de Hammer o Matt Helm, personajes pilares de la novela pulp, al ser aliado del jefe de la policía James Gordon (Jeffrey Wright) en la lucha contra el crimen.
En el camino, se topa con una femme fatale, Selina Kyle/Gatúbela,( Zoé Kravitz) quien busca venganza en contra de la mafia que ha permeado Gotham y es la causante de la desaparición de su amiga.
En la ciudad, un diabólico sujeto con características de caricatura, y reivindicaciones sociales llamado
Riddler (Paul Dano), pone de cabeza a la policía, por su escalada de asesinatos de políticos corruptos.
Batman a la par de todo esto, tiene que tratar con un mafioso al que le faltan cuacs, para conectar con su maldad: Oswald Cobblepot/ El pingüino (Collin Farrel).
Pasada media hora del filme, todos los personajes clásicos del cómic ya han aparecido, pero con mucha estructura y poca alma.
Es verdad que el filme toma mucho del espíritu de
Año uno (Miller, Mazzchuelli, 1987), novela gráfica fundacional, clásica de la era moderna del cómic, pero en aras de meter al género en una madurez, que ya ha logrado hace años, falta calor, y tiene sobradas concesiones al público.
Tan es así, (spoiler), que no hay batalla campal entre el héroe y los villanos.
Se entiende, es complicado que después de varias miradas al personaje es muy difícil encontrar un tono propio: Burton, Nolan, para no citar la interpretación de Ben Affleck, pero Reeves, se esmera en mostrar intelecto. Se olvida, pues del origen de todo este asunto.
The Batman, está bien. Tal vez demasiado a nivel de corrección fílmica. Es una película inteligente, pero en algún punto, se extrañan algunos ¡Cuas! ¡Pum!,y esas cosas.