¿Votar o no votar?
Faltan escasos 12 días para la consulta popular de revocación de mandato y el dilema está entre ir o no a votar el próximo domingo 10 de abril.
Sea cual sea la decisión de la sociedad mexicana, y obviamente la tlaxcalteca, lo más importante de este ejercicio democrático es no dividirnos como sociedad. Y es que el resultado de la votación ya lo conocemos: el ganador absoluto será el presidente Andrés Manuel López Obrador en todos los escenarios previstos.
El mandatario triunfará no solo porque él es el principal promotor de este ejercicio democrático, sino porque sus propias huestes morenistas fomentan en todo el país el ya famoso ¡Que Siga AMLO!
GALIMATÍAS
En una charla, una familiar que es beneficiaria de un programa social del Gobierno Federal (65 y más) me pidió explicarle la revocación de mandato porque no comprendía de qué trata y ella no quiere que AMLO se vaya, y fue algo realmente difícil hacerle entender que la revocación la pidió López Obrador y su partido Morena para sí mismos y la oposición está en contra de que la gente vaya a votar porque ellos quieren que el presidente se quede los seis años para los que fue electo.
Lo que quiero decir es que este galimatías en el que se ha convertido la consulta popular mantiene confundido al ciudadano de a pie, aquel que está más centrado en sus problemas cotidianos que en la grilla política y, a estas alturas, no tiene certeza de lo que le piden ir a votar.
La oposición–montada en su papelconvoca al electorado a no caer en el juego mediático del presidente al tratarse de una estrategia para debilitar al Instituto Nacional Electoral.
No solo eso, también argumentan que desde el Congreso fue cambiada la pregunta para favorecer al mandatario y también modificaron la ley para que funcionarios puedan fomentar la participación social, aunque eso aún es indebido.
A eso se suma que ya están pidiendo a beneficiarios de programas sociales acudir a las urnas, de lo contrario amagan con que dejarán de recibir sus apoyos y comparan la revocación con lo ocurrido en Venezuela y Bolivia con los expresidentes Hugo Chávez y Evo Morales, al promoverla con la intentona de eternizarse en el poder.
Otros actores políticos más centrados opinan que ir a votar es validar el despilfarro de dinero que pudo ser muy útil para comprar medicinas, equipar hospitales o dar becas, y convocan a mostrarle rechazo total a AMLO haciéndole vacío.
VAMOS A VOTAR
Coincido totalmente en que la revocación de mandato es un ejercicio innecesario en los términos en los que se plantea porque es vista como una ratificación a la popularidad del perseverante mandatario, quien “necio” -como se autodenomina-, insistió hasta cumplir su capricho prometido en campaña.
No solo eso, representa un gasto excesivo para una consulta en la que la gran mayoría de votantes no quiere que se vaya el presidente.
Si como mexicanos vamos a confiar en una figura como la revocación de mandato, es para cuando la sociedad la pida y considere que el gobernante en turno no está haciendo bien al país y sea necesario preguntarle a la gran mayoría de los electores si quieren que se quede o que se vaya.
Empero, consideró que quienes convocan a no ir a votar el 10 de abril con la intención de dejar solo al presidente, para que vea que la mayor parte de mexicanos no están con él, están cayendo en un absurdo, porque también serán corresponsables de todos los actos que cometa en los próximos 30 meses que le quedan de mandato.
Una democracia se fortalece con el voto ciudadano, no a través del abstencionismo, pero más allá de si acudirán o no a las urnas, insisto, lo más importante de la revocación de mandato es que no nos divida como mexicanos.
ADIVINA ADIVINADOR…
Y ya que hablamos de ejercicios democráticos, resulta necesario preguntar: ¿qué habrá sucedido con el Observatorio Legislativo integrado en noviembre de 2021 por diversos “activistas” para supuestamente vigilar el trabajo de los 25 diputados locales?
Un dato: se sabe que una de las principales impulsoras de este grupo anda muy ocupada en su trabajo como asesora de imagen del Poder Judicial y no le da tiempo cumplir con la labor social que tanto alardeó?