Más evidencias de la emergencia climática
Desde el Reino Unido hasta el norte de México, las intensas olas de calor son una señal más de la emergencia climática que vivimos
Lequipo en Carbon brief (2022). La COP ayudó a incrementar la atención en el tema, aunque aún hay medios que no lo quieren publicar. Sin embargo, el grueso de la población ve la relación entre el incremento de la temperatura y el cambio climático, reconociendo que es anormal y que se debe tomar acción.
En el caso de México, pese a que es un problema recurrente, las autoridades y los medios de comunicación no han enfatizado la relación entre las sequías y el cambio climático. En días recientes, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) y la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) emitieron un comunicado alertando sobre la emergencia por sequía, sin reconocer que esto está ligado a la emergencia climática que se vive en el mundo.
Pese a que es un problema recurrente, las autoridades y los medios mexicanos no han enfatizado la relación entre las sequías y el cambio climático
Reconocer la relación de ambos fenómenos es fundamental para tomar responsabilidad ante el origen del problema, y hacerle frente. La comunidad científica está clara en que el incremento de las emisiones y de la temperatura está asociado a la creciente emisión de gases de efecto invernadero por la producción y quema de combustibles fósiles como el petróleo, el gas y el carbón (IPCC, 2022).
Mientras que en el Reino Unido el 21.5 por ciento de la generación de electricidad vino de fuentes bajas en emisiones en 2020 (BEIS, 2021), y en el caso de México fue de 26.4 por ciento (IMCO, 2021), la mayor parte de la generación viene de fuentes fósiles.
Esto, además de que lo que se denomina energía limpia en ambos casos, que tiene recursos como la nuclear, que es la mayoría en el caso del Reino Unido (6.6 por ciento) y grandes hidroeléctricas (8.3 por ciento) en el caso de México, ambas cuestionadas por su sustentabilidad. Por los desechos radioactivos en el caso de la primera, y por los desplazamientos e incertidumbre en el contexto de sequía en el caso de la segunda.
Estas altas temperaturas deben alertar a los países para combatir el problema del cambio climático de raíz. El escenario pandémico y con altas temperaturas será cada vez más frecuente si no reducimos las emisiones de manera acelerada.
Estos acontecimientos también nos exigen aumentar la capacidad adaptativa ante las altas temperaturas. Los planes de descarbonización y resiliencia climática son un imperativo en estos y todos los países del mundo.
* Especialista en desarrollo bajo en carbono y financiamiento climático.
Fundadora de GFLAC (Grupo de Financiamiento Climático para
Latinoamérica y el Caribe).