El titán del petróleo ve a la economía creativa
Arabia Saudita busca abrirse culturalmente con un festival que reúne 130 artistas locales y del mundo
Spark To Spirit /Enviada
RIAD. Arabia Saudita puso en marcha la segunda edición del festival de arte y luz Noor Riyadh, que planea convertir en uno de los más grandes de su tipo en el mundo y es una pieza fundamental del plan trazado hace apenas cuatro años para diversificar su petrolizada economía y abrir culturalmente al país.
El reino no desdeña las jugosas ganancias que le aporta el llamado “oro negro” y tampoco podría. Sólo en el tercer trimestre, Aramco, la petrolera estatal y la más grande del orbe ha reportado un beneficio de 42 mil 400 millones de dólares, el segundo más alto en su historia resultado de la fuerte demanda tras la pandemia y ahora la guerra entre Rusia y Ucrania.
Pero antes de esta fiebre petrolera, cuando el debate global giraba en torno a la despetrolización de la economía global, el ánimo transformador alcanzó al mayor productor de petróleo. En 2018, el príncipe heredero Mohammed bin Salman bin Abdulaziz trazó un plan denominado Visión 2030 que plantea 11 programas dirigidos a transformar áreas como la salud, la vivienda, la industria y la calidad de vida de los habitantes del reino.
Uno de los primeros pasos para modernizar el profundamente conservador reino musulmán se dio a mediados de abril de 2018, con la inauguración del primer cine comercial tras casi cuatro décadas de su prohibición promovida por los
“Noor Riyadh va a generar muchos puestos de trabajo” MIGUEL BLANCOCARRASCO DIRECTOR DE NOOR RIYADH
islamistas. Se proyectó la película Black Panther en una pantalla de casi 14 metros dentro de una antigua sala de conciertos en Riad; acudieron funcionarios, dignatarios extranjeros y figuras de la industria.
Aunado a ello, el príncipe eliminó las restricciones a los conciertos públicos, la conducción por parte de mujeres y la mezcla de géneros. En 2019 Arabia Saudita emitió las primeras visas para turistas, restringidas hasta entonces a peregrinos que viajaban a la Meca, empresarios y trabajadores.
El festival Noor Riyadh es parte de este cambio. “Arabia Saudita está en proceso de transformación, de una economía basada en el petróleo a una economía mucho más diversificada y la economía creativa es sin duda una de las prioridades; es la tercera economía del mundo (por su valor), detrás de Estados Unidos y China”, explica Miguel BlancoCarrasco, director ejecutivo del festival de arte y luz.
“Noor Riyadh tiene un papel que cumplir porque al igual que los pilares de Riyadh Art, va a generar muchos puestos de trabajo”, agrega.
El festival que inició el 3 de noviembre y termina el 19, justo antes del inicio del Mundial de Qatar, espera que por cada dólar invertido se genere un retorno de tres dólares, directa o indirectamente.
BlancoCarrasco se incorporó al proyecto en 2019. Cuando inició la planificación para la primera edición en marzo de 2021, todavía con las restricciones de la pandemia, y con un registro de 63 obras distribuidas en 13 sedes.
Para esta edición que lleva como lema “Soñamos con nuevos horizontes” todo se multiplica. Habrá 40 localizaciones o sedes, más de 190 obras de 130 artistas de Arabia Saudita y de todo el mundo. La expectativa es que reciba entre uno y 1.5 millones de visitantes, sobre todo del extranjero, según cuenta BlancoCarrasco.
Bajo el concepto de “galería sin paredes”, el festival iluminará la capital saudita con instalaciones inmersivas, obras de arte públicas monumentales, esculturas efímeras, senderos artísticos, realidad virtual, proyecciones de edificios y espectáculos de drones.