“Informitis”
En pleno
cierre de 2022 ningún alcalde se quiere quedar atrás en eso de dar su informe de gobierno.
Después del Primer Informe de Gobierno que rindió la mandataria Lorena Cuéllar Cisneros ante cientos de personas reunidas el pasado cuatro de diciembre en el Centro de Convenciones de Tlaxcala, vinieron las réplicas por parte de autoridades municipales.
Pero a diferencia de la comparecencia de la mandataria estatal, en la que sí tuvo algo que presumir y los números pueden ser verificados y contrastados, los munícipes que llevan poco más de un año de asumir las riendas gubernamentales, se quedaron cortos y han caído en “informitis”, con discursos huecos, cifras alteradas y poco creíbles, además de acciones que forman parte de su obligación.
¿Acaso se les tiene que aplaudir por implementar acciones de seguridad; sustituir lámparas; barrer calles; ejecutar obras o por brindar trámites y servicios? ¿No para eso se les paga?
Pese a lo anterior, algunos alcaldes ya brincaron la primera barrera y a los que les ha ido bien, como es el caso de Pablo Badillo en Apizaco, han recibido aplausos y elogios por la forma de comunicar su trabajo cotidiano.
El que llamó la atención fue Jorge Corichi Fragoso, alcalde de Tlaxcala Capital, por dar su informe desde la comodidad de la Sala de Cabildo como se lo recomendaron sus “experimentados” estrategas para no exponerlo al pueblo ni mucho menos recibir la indiferencia o reclamos sociales.
¿Acaso el alcalde mejor aprobado de Tlaxcala según firmas encuestadoras foráneas le tuvo miedo a la exposición pública? Es pregunta que parece afirmación.
A quien su Cabildo no se la perdonó fue al munícipe de Lázaro Cárdenas, Agripino Rivera Martínez, pues en pleno acto de informe recibió reclamos y tuvo que huir al final del evento. Incluso, al intentar ser entrevistado por el reportero Pablo Morales, su personal se portó agresivo y amenazante contra el comunicador de la región norte de la entidad.
Otros alcaldes han sido más creativos y anunciaron bailes populares, comilonas y hasta posadas para los asistentes, a manera de distractores para evitar ser cuestionados y no precisamente sobre lo que ya hicieron, sino por lo que les falta por hacer o por los compromisos incumplidos.
Pero si hay algo que señalar, es a aquellos alcaldes que prefieren nadar de muertito y pasar su gestión de manera por demás intrascendente, como Armando… Armando… el alcalde de Tlaxco cuyos apellidos no me vienen a la mente pues su actuar ha sido tan gris que ni su nombre completo se logra recordar en el espectro político local.
La única certeza es que al cierre de 2022 los 60 alcaldes de Tlaxcala han tenido la fortuna de contar con el respaldo del Gobierno del Estado para medio informar lo que han podido hacer, pero para 2023 y entrado el año electoral de 2024, se verá si en verdad cumplirán su palabra de mejorar las condiciones de sus conciudadanos o simplemente se hicieron cargo de cavar su propia tumba política.
¡ESCÁNDALO!
Ya lo dijo Margarita “La Diosa de la Cumbia” ahora que ofreció tremendo concierto durante la Feria Tlaxcala 2022: “escándalo… es un escándalo”.
Se acerca el cierre de 2022 y con él se van los escándalos protagonizados por personal asignado a tareas de seguridad pública, los cuales quedarán para el recuerdo.
Ojalá que durante 2023 ningún elemento de la Policía de Investigación sea detenido por incurrir en extorsión, como sucedió en Chiautempan; que ningún militar sea detenido por cometer el delito de secuestro, como en Tlaxco; o que policías municipales no usen las patrullas para embriagarse y, de paso, provocar accidentes, como ocurrió en Tlaltelulco.
El caso más bochornoso del año se lo lleva el exdirector de Seguridad Pública del municipio de Tlaxcala, Juan Carlos Miranda, quien junto con dos mandos medios más participó en un choque en completo estado de ebriedad a bordo de un vehículo particular, lo que derivó en su destitución inmediata.
FELICES FIESTAS
El tiempo literalmente vuela y nuestro paso por este terrenal mundo cada vez se acorta más.
A propósito de las fiestas decembrinas deseo que la salud, el amor y la paz renazcan en su corazón y que las presentes fechas sean propicias para renovar nuestro espíritu para los siguientes 365 días, al lado de quienes más amamos.
Nada Personal se toma un descanso quizá no merecido, pero sí necesario, con el deseo de leernos nuevamente el próximo cuatro de enero. ¡Feliz Año Nuevo!
Asesinaron y