“El fiscal es culpable de llegar a los golpes, su familia nos agredió”
MAYORDOMO
Un helicóptero imponer, simplemente que el pueblo se entere de lo que está pasando para bien de fiscal y de nosotros; nuestra tarea es servirle a nuestra patrona”. Acusaron al fiscal de prepotente y de asegurar que es el tiaxca de la iglesia.
Ante las agresiones del viernes pasado, Díaz Quintero informó que iniciaron los trámites legales en contra de los responsables de generar daños en el rostro de su esposa y golpes a sus hijos menores de edad.
Mencionó que el fiscal y su esposa estela N. son comerciantes en el callejón Bocardo de Zacatelco, pero por las ganancias que obtiene en la Iglesia Católica ha dejado su actividad comercial para dedicarse de tiempo completo a su labor en la parroquia.
DESALOJO
La llegada sin avisar del fiscal a la rueda de prensa, efectuada en el atrio, encendió los ánimos de los feligreses, quienes no lo dejaron hablar y luego de 10 minutos lo retiraron forzadamente del espacio religioso.
Fue escoltado y protegido en su salida por policías municipales, quienes lo llevaron a la alcaldía.
GANANCIAS
Feligreses de Zacatelco reportaron que los baños de la parroquia generan ganancias superiores a los tres mil pesos diarios, por el cobro de cinco pesos por persona. Además refirieron que la renta de espacios al exterior del templo llega a los 300 pesos, por lo que en suma, hay una ganancia superior a los tres mil pesos por día.
GABRIEL DÍAZ
Ante las agresiones del viernes pasado, Díaz Quintero informó que iniciaron los trámites legales en contra de los responsables de generar daños en el rostro de su esposa y golpes a sus hijos menores de edad.
La inconformidad es que no hay ninguna rendición de cuentas y este cargo se ha convertido en un negocio, el que se refleja en que Cruz Escalante integró a su esposa Estela N., yerno, hijas y nietas a cobrar el ingreso a sanitarios, vender dulces y otras golosinas y a rentar las áreas fuera del templo.
MENSAJE DEL PÁRROCO
Antes del desalojo del fiscal, el párroco de Zacatelco, Sergio Pérez Jernández, emitió un mensaje en el que lamentaba los hechos ocurridos la noche del viernes pasado. Recordó que como hijos de Dios “no podemos perder la paz y la armonía”.
Sostuvo que el cargo de fiscal, mayordomo en la parroquia “deben ser ejercidos siempre con fe, buena voluntad y con la exigencia de ser verdaderos servidores en el bien de nuestros hermanos y para la gloria de Dios, a ejemplo de Jesucristo”.