Cayó de rodillas
especialmente compromisos como el disputado ayer en el Alfredo Di Stéfano, donde se creció, especialmente, desde el minuto 5, cuando se encontró con la ventaja en el marcador, gracias a un penalti.
Un tiro de esquina llevó el balón a la cabeza de Víctor Laguardia y terminó en el brazo de Nacho Fernández. Lucas Pérez no falló el cobro y adelantó al Alavés.
Cinco penaltis en los tres últimos partidos han castigado al Real Madrid. A los tres de Valencia y al de Villarreal se sumó este ante el Alavés. No es excusa. Tuvo todo el partido para enmendar este contratiempo. Pero tampoco sucedió.
Alavés tuvo el segundo tanto en un mano a mano de Lucas que Thibaut Courtois ganó cerca de la media hora, poco antes de que Eden Hazard volviera a lesionarse.
La entrada de Rodrygo Goes, sin embargo, despertó a los Merengues, que cercaron la portería de Fernando Pacheco, quien sostuvo a su equipo especialmente en la doble acción de Toni Kroos, la más clara del Real Madrid en el primer tiempo.
Tras el descanso, un error de Courtois fue aprovechada por Joselu, quien anotó el 2-0 en el minuto 49.
Después, el portero belga salvó a su equipo de un castigo mayor, cuando el Real Madrid intentó tirar de épica, desordenado, con Vinícius Junior ya en el campo.
El defensor Florian Lejeune rechazó, sobre la línea de meta, el remate hecho por Casemiro, a la desesperada y con sólo nueve minutos por delante.
Así llegó el tanto del Real Madrid, en un barullo que el volante brasileño aprovechó tras el mal remate de Rodrygo. Fue así como intentó evitar la derrota del Real Madrid, que arrinconó al Alavés hasta el final, lanzó al travesaño en la última acción por parte de Isco Alarcón, pero no acabó con el Alavés, aferrado a su merecido éxito hasta el final.