Julio Menchaca
El número de infecciones ocasionadas por el SARSCoV-2 continúa siendo elevado en nuestro país. En Hidalgo este domingo, a ocho días de la elección para renovar los 84 ayuntamientos, se contabilizan 13,907 casos y 2078 personas que, lamentablemente, han perdido la vida. La pandemia de Covid-19, es ya la cuarta causa de muerte en México, según el presidente del Inegi.
Mientras no exista una vacuna o un tratamiento eficaz para combatir la pandemia, tendremos que acostumbrarnos a coexistir con el virus. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) publicó en abril que la enfermedad: “podría involucrar olas epidémicas recurrentes intercaladas con períodos de transmisión de bajo nivel”. En abril pasado, el experto en enfermedades infecciosas Anthony Fauci ya había señalado, que el Covid-19 puede convertirse en una enfermedad cíclica estacional e intensificarse durante los periodos invernales.
El doctor Fauci declaró la semana pasada que el evento llevado a cabo en la Casa Blanca el 26 de septiembre para presentar a la jueza Amy Coney Barret como nominada del presidente Trump para ocupar un asiento en la Suprema Corte de Justicia; fue de “superpropagación”. El brote surgido en el 1600 de la avenida Pensilvania ha afectado hasta el momento a 34 personas, incluida la pareja presidencial.
Las declaraciones posteriores del Presidente sobre su estado de salud fueron inquietantes, afirmando que el virus fue una “bendición” y con ello, minimizando con absoluta irresponsabilidad, el hecho de que más de un millón de personas ha muerto por la enfermedad, a tan solo diez meses de su aparición. Al contrario de lo que señala Trump, el virus es peligroso, en ocasiones mortal y con secuelas aún desconocidas.
Los procesos electorales que se viven en Hidalgo y en Coahuila, pueden ser, también de “superpropagación”. Aunque las campañas se han orientado al internet; los eventos presenciales, los recorridos y más aún, la larga jornada electoral en la que durante horas compartirán un espacio físico, múltiples personas, entre funcionarios de casilla, representantes de los partidos y de las autoridades electorales, así como los propios votantes; pueden propiciar la irrupción del virus.
La celebración de elecciones es un principio fundamental de la democracia, pero, dado que actualmente debemos convivir con este virus, nuestros procesos deben cambiar, adaptarse a la realidad natural que no obedece a los caprichos humanos. Desafortunadamente en Hidalgo, los candidatos e integrantes de las campañas han sido afectados por la enfermedad.
La Organización de los Estados Americanos y la OPS, recomendaron en su “Guía para organizar elecciones en tiempos de pandemia” la estabilización de los niveles de contagio, previo a la celebración de elecciones. El domingo iremos a las urnas, en semáforo naranja, por lo que debemos extremar las medidas sanitarias para cumplir con la democracia. Los invito a que lo hagamos por nuestro estado y por México. Nos vemos el domingo.
Mientras no exista una vacuna o un tratamiento eficaz para combatir la pandemia, tendremos que acostumbrarnos a coexistir con el virus